Plato caliente

Las judías blancas con chorizo y oreja es un plato que siempre encontrabas en la cocina de mi abuela, hechas a puchero y a fuego lento. Recuerdo como nos sentábamos a la mesa mis primos y yo con la cuchara en alto peleándonos por ser ver quien sería el primero en ser servido. Un recuerdo que materializo siempre que puedo comiendo este nutritivo y completo plato.
Ponemos las judías a remojo durante toda la noche para que se vayan hidratando y así no tarden tanto en cocinarse.

Este arroz a la crema de coco es un plato sencillo de hacer y que se convertirá en una magnífica guarnición para tus platos, otorgándoles un toque especial proveniente de la leche de coco y el azafrán. Me enseño la receta una amiga y la verdad es que es un auténtico descubrimiento.
Es una receta realmente sencilla. Lo primero que hacemos es que en un sartén se calienta el aceite y se fríe el arroz hasta que esté bien empapado, que se vea tranparente.

Aquí siempre hemos dado por sentado que la pasta carbonara llevaba nata para su elaboración, pero la receta original no la lleva y es la que hoy os traigo. Una receta apta para los alérgicos a la lactosa y que conserva todos los maravillosos sabores a los que estamos acostumbrados. Pruébala y veras que la nata no es necesaria para degustar una deliciosa pasta.
Cocer la pasta en olla con mucha agua y sal.
Mientras se cuece la pasta, freímos la cebolla cortadita y el bacon en una sartén con un poco de aceite de oliva.

Cuando pruebes esta sopa de coliflor te darás cuenta de la complejidad de sus sabores aportados por las especies. Pero a pesar de ello no resulta nada agresiva gracias a la incorporación del yogurt. Es un `plato sencillo que resaltara por sus maravillosos sabores y aromas.
En una sartén se calienta el aceite de vegetal, puede ser de oliva u otro que te apetezca, y se le añade la coliflor y el agua y se deja que hierva a fuego bajo durante unos 10 minutos con la tapadera puesta.

El puré de patata tipo bomba es un aperitivo perfecto por si tenemos alguna celebración, aunque yo lo suelo hacer bastante a menudo. Es una receta sencilla de seguir y deliciosa de comer, porque lo hace sola. Pruébala y disfruta tanto como nosotros lo hacemos en casa.

Siendo el arroz uno de mis ingredientes favoritos, siempre me propongo hacer platos con cualquiera de sus variantes y acompañados de casi cualquier cosa. Una de las recetas que más me gustan es esta de arroz integral con jamón y verdura. Un plato sencillo pero realmente sabroso.

Los médicos nos insisten en que tenemos que comer carne de conejo porque es una de las más sanas que hay, por la cantidad de nutrientes que nos aporta junto que tiene poca grasa. Pero aún así no la comemos demasiado. Una receta que seguro que te anima a comerla más a menudo es esta de conejo con patatas y manteca. Un guiso absolutamente sabroso.
Cortar el conejo en trozos pequeños y sazonarlos. En una cazuela amplia poner el aceite una vez caliente. Pasamos el conejo por harina y lo freímos levemente. Tras eso lo retiramos y reservamos mientras hacemos la salsa.

La salsa más habitual en nuestros platos es la de tomate, pero aquí te traigo una variante que te va a gustar mucho. Es una salsa de tomate marroquí, que se diferencia de la típica por las diferentes especias que lleva. Muy sabrosa y el perfecto acompañamiento para tus platos.

La cocina italiana se ha extendido por el mundo colonizando nuestras comidas. Pocas son las semanas en las que en nuestras mesas no haya un plato procedente de allí. Y es que no sólo es una comida que está buenísima, sino que además es sana y nutritiva. Pastas y pizzas son las más habituales. Hoy os traigo una magnífica receta de lasaña de champiñones con bechamel. Nosotros en casa la solemos comer muy a menudo, y estoy seguro de que si la probáis, vosotros haréis lo mismo.

Esta sopa irlandesa de patata y puerro es un plato maravilloso, que esconde todo su secreto en la utilización de la mejor materia prima que se pueda conseguir para hacerla, una buena patata y un buen caldo. Una receta sencilla, económica pero llena de sabor. Un buen invento de nuestros amigos los irlandeses, sólo imagínate cenándola en una fría noche de invierno.