Plato caliente

Un día me apetecía pasta, y cuando estaba pensando con que acompañarla me acorde que tenía una berenjena en la nevera que tenía que utilizar, asique decidí hacer esta deliciosa salsa suave de berenjena para acompañarla, y la verdad es que resultó todo un éxito. La combinación de la pasta y la salsa fue perfecta.
Para hacer la salsa lo primero que se debe hacer es lavar la berenjena, cortar y dejar en remojo con agua y sal para quitar el amargor que tiene.

La receta de patatas gratinadas con queso cheddar nos muestra la versatilidad que tiene este alimento a la hora de cocinarse. Este tubérculo originario de América nos ha proporcionado tanto deleite en nuestra cocina que bien se merecería un puesto entre los grandes alimentos de nuestra dieta, bueno, en la mía está.

Esta salsa casera de tomates comenzó siendo una escusa para aprovechar los tomates que se nos estaban empezando a poner pochos en el frigorífico, pero con el tiempo ha pasado un esencial de mi cocina para la que sólo utilizo los mejores productos. Buena y sencilla es el acompañamiento perfecto para pastas, carnes y pescado. Lo mejor, que se puede conservar si haces de más.

La pasta es uno de los alimentos que más consumimos, porque es fácil de hacer, rápida y esta buenísima. Esta receta de pasta con salsa de tomate al oporto es riquísima. Puede parecer una pasta con salsa de tomate normal, pero el toque que le da el oporto es único. Una delicia.

Los huevos esparragados es un plato completo y delicioso que a partir de ahora se convertirá en una cena habitual para ti y tu familia. Fáciles y sencillos, como la mayoría de las cosas buenas de la vida.
Lo primero que se hace es un refrito con la cebolla, los ajos y el pan. Cuando este la cebolla transparente, se le refrié un poquito de pimentón y se le agrega agua. Lo dejamos cocer un poco en la sartén y se pasa todo por la batidora.

La pularda es un tipo de gallina que es muy apreciada en la alta cocina ya que posee grasa infiltrada entre sus carnes, haciéndola suave y jugosa para comer. Suele ser un poco cara, pero por qué no permitirnos un pequeño capricho de vez en cuando o para una de nuestras celebraciones. Una receta que la hace completamente justicia es esta de pularda trufada y asada. Es un pequeño lujo pero un auténtico manjar de dioses.
Para empezar, haga unos cortes en la piel de la pularda y rellenarlos con láminas de trufa.

A mis hijos no les gustan nada las verduras asique casi siempre tengo que estar inventando cómo hacérselas comer. Una de las formas en que lo hago es como esta deliciosa crema de espinacas que les encanta. Es sencilla y nada complicada de hacer. Un excelente plato caliente.
Lavar muy bien las espinacas.
Pelar y trocear la cebolla y sofreír en la margarina durante 5 minutos.
Añadir las espinacas y el caldo y cocinar a fuego medio durante 30 minutos.
Mezclar la harina con la leche. Añadir a las espinacas y poner a fuego alto

Aprende a hacer esta deliciosa receta de pasta con camarones fácil y rápida de hacer, que a mi más de una vez me ha salvado de un apuro. Pato delicioso donde los haya.
Lo primero que tienes que hacer es poner una cazuela con abundante sal al fuego para cocer la pasta. Dejarla hirviendo hasta que esté al dente (lo mejor es que sigas las instrucciones del fabricante).
Mientras se hace la pasta, en un sartén se calienta el aceite de oliva y se fríe la cebolla picada y añade los camarones y los guisantes, salpimiéntelos al gusto.

El pastel del pastor que os traigo es una versión del delicioso pastel de patatas. Es un plato completo y delicioso que gustará a todo el mundo. Receta fácil donde las haya con un resultado exquisito si sigues los siguientes pasos.
Pela y pica la cebolla, raspa las zanahorias y limpia los champiñones, lávalos y trocéalos; rehoga la cebolla en una sartén con 3 cucharadas de aceite, durante 8 minutos.
Añade la carne y cuando cambie de color y esté bien desmenuzada, incorpora las zanahorias y el tomate. Lava, seca y pica la albahaca.

A mí me enseñaron esta receta como guarnición, pero las patatas con beicon y mozzarella me parece un plato tan contundente que lo suelo comer como plato único. Si no estás a dieta, o lo estás y quieres darte un capricho, háztelas un día. De lo buenas que están debe de ser pecado.
Freímos las patatas, que hemos pelado y cortado en bastones. Mientras en otra sartén aparte sofreímos el bacon sin nada de aceite porque él por sí solo ya va a soltar grasa. En una fuente ponemos las patatas y encima el bacon, con la mozarela por encima.