Pollo asado navideño

Una receta sencilla, riquísima y …económica, ¿por qué no vamos a poder preparar en Navidad recetas así… ricas y que no nos destrocen nuestro bolsillo?... prueba, y verás el éxito que cosechas, ¡asegurado! 

Paso 1:

Escurre bien el líquido de las aceitunas y pícalas en trocitos finos. Colócalos en un colador, para que suelten todo su agua. Cuando ya estén bien secas y escurridas, mézclalas con la mantequilla en pomada, es decir, bien blandita y moldeable –pero no derretida- el orégano, el pimentón picante y un poco de sal.

Paso 2:

Pastas de té navideñas

Tomar el té a las cinco… es una costumbre muy británica. Sin embargo, si lo vas a acompañar de unas deliciosas pastas de té, estarás deseando que el reloj marque la hora para sentirte como la mismísima Reina de Inglaterra. Con té o con café, a las cinco, en la sobremesa o a media mañana… lo cierto es que estas delicadas pastas elaboradas a base de mantequilla son una delicia. Durante las Navidades, hazlas con formas navideñas… ¡alegrarán el centro de cualquier mesa!

Paso 1:

Relleno para asado navideño

Un pollo, un pavo o un capón… sea cual sea el plato que deseas elaborar durante estas fiestas navideñas, sigue esta receta para el relleno: es tan fácil como deliciosa y, lo mejor de todo, el éxito está asegurado. También puedes hacer esta preparación de forma independiente, gratinada en el horno, y servirla aparte, acompañando platos como un redondo, un asado, etc. 

Paso 1:

Cebollas rellenas de jamón

Una receta fácil y deliciosa que puedes tomar sola como un entrante dentro de un menú de fiesta… o bien como guarnición de otro plato… un pavo relleno, un asado… incluso un pescado. Todo un acierto con el que triunfarás durante estas fiestas.

Paso 1:

Pela las cebollas con mucho cuidado, para que queden lo más enteras posible. Acerca una olla o cacerola al fuego con abundante agua y cuando rompa a hervir, añade sal y las cebollas. Cuécelas a fuego suave durante más o menos 35 minutos, o hasta que estén tiernas. 

Paso 2:

Rollo de canela y pasas

Una receta para los más golosos y para demostrar lo cocinillas que es uno… porque hablamos de un postre elaborado y que requiere de cierta habilidad y paciencia… pero el resultado lo merece. ¡Serás la triunfadora entre tu familia e invitados!

Paso 1:

Mezcla la levadura y el azúcar en el agua tibia, mueve un poco para que la levadura se disuelva y deja reposar 10 minutos hasta que haga un poco de espuma. Este es el prefermento necesario para realizar la masa.

Paso 2:

Pan challah

El pan challah es el pan hebreo que los judíos toman habitualmente durante el sabbath, un pan trenzado de levadura cuya masa se enriquece con aceite, huevos, miel y pasas.

Paso 1:

Spanakopita o pastel griego de espinacas y queso

Este plato es el pastel salado más famoso de Grecia: Spanakopita o pastel griego de espinacas y queso. Por supuesto, en la receta original griega emplean queso feta... el queso más emblemático heleno. Sin embargo, si no lo encuentras, o si prefieres uno más económico, lo puedes sustituir por un queso fresco con sabor, o incluso por queso semicurado rallado. En Grecia se toma habitualmente como aperitivo… ¡y a veces como desayuno!

Arroz al horno con garbanzos y setas

Una receta muy fácil, sencilla, nutritiva y, lo que es mejor, rica y sorprendente. Desde luego, se trata de un arroz diferente. Una idea original ideal para variar nuestro recetario y sorprender a los comensales.

Paso 1:

Pon a remojo las pasas durante tres horas para que se hidraten. Reserva.

Paso 2:

En un sartén con un chorrito de aceite, rehoga los ajos cortados en láminas con las pasas durante 2 o 3 minutos cuidando de que no se quemen ni se doren demasiado. Incorpora el arroz y sofríelo todo junto 2 minutos.

Crema ligera de verduras al horno

Una receta fácil, sana, ligera, rápida…y deliciosa. Juega con la nata para hacerla más gustosa, o elimínala si te preocupa guardar la línea. Pero no elimines ni el queso de cabra ni la albahaca… porque son los dos elementos que le dan personalidad y un gran sabor a esta crema.

Paso 1:

Pela la calabaza, la patata, la cebolla y las zanahorias. Lava el puerro y quítale las hojas exteriores, la raíz y la parte verde más dura. Lava también el calabacín y desecha sus extremos, pero no lo peles. Pica toda la verdura en trozos de tamaño mediano.