Rollo de canela y pasas

Una receta para los más golosos y para demostrar lo cocinillas que es uno… porque hablamos de un postre elaborado y que requiere de cierta habilidad y paciencia… pero el resultado lo merece. ¡Serás la triunfadora entre tu familia e invitados!

Paso 1:

Mezcla la levadura y el azúcar en el agua tibia, mueve un poco para que la levadura se disuelva y deja reposar 10 minutos hasta que haga un poco de espuma. Este es el prefermento necesario para realizar la masa.

Paso 2:

Para la masa, pon dentro de un bol grande la harina en forma de volcán. En el centro, añade el resto de ingredientes, esto es, el huevo, la leche tibia (no es necesario que esté muy caliente, pero sí que no esté fría), el azúcar, la sal y la mantequilla en pomada, es decir, cuando no está derretida pero sí a punto, lo suficientemente blanda como para trabajar con ella. Añade también el prefermento.

Paso 3:

Ve mezclando bien los ingredientes, con la ayuda de una espátula en primer lugar y después con las manos (en este momento te resultará más cómodo sacar la masa del bol y amasarla sobre la encimera). Ve trabajando la masa hasta que tenga una textura uniforme, suave y moldeable. Cuando lo hayas conseguido, deja fermentar tu masa, de nuevo dentro del bol, en un sitio cálido (lo ideal es entre 20° y 27°) cubierto con plástico film, durante una hora o hasta que la masa duplique su volumen.

Paso 4:

Pasado este tiempo, saca la masa de nuevo del bol, aplástala un poco para quitar el gas que forma el gluten con la levadura. Estira la masa con un rodillo sobre la encimera con un poco de harina espolvoreada para que no se pegue y forma con ella un rectángulo de un centímetro de grosor aproximadamente.

Paso 5:

Sobre este rectángulo de masa, dispón el relleno. Para elaborarlo, mezcla bien hasta que se integren el queso crema, la mantequilla, la esencia de vainilla, el azúcar y la canela molida. Extiende bien este relleno encima de la masa y espolvorea las pasas de uva.

Paso 6:

Enrolla la masa con mucho cuidado y procurando que el relleno no se escape. Una vez que hayas terminado el rollo, córtalo en trozos de 4 centímetros formando ruedas.

Paso 7:

Dispón estas ‘ruedas’ en una placa para horno y tápalas con un paño húmedo. Déjalas fermentar de nuevo hasta que crezcan y hayan duplicado su volumen. Recuerda que esta operación se realizará más rápido en el sitio más cálido de la casa.

Paso 8:

Una vez que haya duplicado su volumen, hornea a 180° durante 30 minutos.

Paso 9:

Mezcla el azúcar glas con el zumo de naranja y la esencia de vainilla hasta formar una pasta uniforme, que será la base del glaseado. Inmediatamente después de sacar los rollos del horno, decora con el glaseado por encima.

Presentación:

Espera a que se enfríen los rollos… o al menos a que se atemperen, y… ¡a comer!.