Pisto con carne de corzo
El pisto con carne de corzo es un poquito diferente al típico, lo cual me encanta porque hay que variar para no aburrirnos de comer lo mismo.
Se lava la carne con un poco de agua, se escurre y se corta en dados pequeños. Se hace lo mismo con la verdura, que puede ir pelada, o sin pelar y cortada al gusto.
Se caliente una sartén en el fuego con un poco de aceite y, cuando está ya listo, se echan las verduras del pisto a pocharse. Cuando están listas, se pasan a una cacerola y se dejan reservadas.
Pochas
Que no falten las pochas, por favor. Era el plato típico en casa cuando éramos pequeños y lo es en mi casa ahora. Como me he vuelto una pesada de la cocina, ahora vienen mis padres a comerlas a casa para evitar cocinarlas.
Corto, en juliana, los pimientos, las zanahorias, los tomates, la cebolla y los puerros. En una olla grande lo pongo todo a cocer en abundante agua junto a las pochas hasta que empiece a hervir. Entonces, bajo el fuego un poquito.
Pastel de alcachofas
La alcachofa es una verdura que debería de comerse bastante a menudo ya que posee gran cantidad de fibra, antioxidantes, es diurética y apenas aporta calorías, pero su sabor no le gusta a todo el mundo, aunque eso sí, a quien le gusta, le encanta. Una forma estupenda de comerlas es de forma de pastel de alcachofas, una preparación muy sencilla en la que las alcachofas van acompañadas por una crema y envueltas en una estupenda pasta.
Guiso de alubias
El guiso de alubias es muy de invierno, ya que es un plato muy contundente, de esos que reconfortan con tan solo olerlos. Es un plato muy completo ya que posee todo lo necesario en una dieta, bueno igual un poco más, ya que es de esos platos llenos de sustancia que es mejor no comer en exceso.
Alcachofas al aceite de oliva
Puedes cocinar de muchas formas las alcachofas, pero siempre he pensado que la mejor forma es simplemente cociéndolas y servirlas con aceite de oliva. Cuando llega la temporada es así como las suelo hacer, porque la verdad es un placer poder disfrutar de un buen plato de alcachofas al aceite de oliva. Para preparar este plato empezamos limpiando bien las alcachofas, quitándolas las hojas exteriores que son muy duras hasta dejarlas sólo con el corazón y seguidamente las untamos con un poco de limón para que no se oxiden.
Buñuelos de acelga y brócoli
Los buñuelos de acelga y brócoli me salen ya riquísimos y en el punto justo de textura. Hacerlos es fácil, un poco de fritanga en la cocina pero nada que no se limpie en unos minutillos.
Judías con jamón
Uno de los platos más sencillos pero más deliciosos que existen es este de judías con jamón. La verdad es que los sabores de las judías y del jamón se complementan perfectamente, dando lugar este deleite de paladares. Fantástico,
Caldo de gallina campera y huesos con tuetano
En los días fríos de invierno o cuando comienzas a sentir que se has constipado, no hay mejor remedio que fortalezca y renueve más que un buen caldo calentito. El que suelo hacer es un caldo de gallina campera y huesos con tuétano. Aún recuerdo los caldos que me ha preparado a mí mi abuela cuando enfermaba. Ahora que yo soy madre entiendo el porqué me hacía bebérmelos a diario de dos a tres tazones. La verdad era que me tomaba uno o dos y parecía otra.
Caldo de verduras con morcillo de ternera
En los días fríos de invierno o cuando comienzas a sentir que se has constipado, no hay mejor remedio que fortalezca y renueve más que un buen caldo casero calentito. El que suelo hacer es un caldo de verduras con morcillo de ternera. Aún recuerdo los caldos que me ha preparado a mí mi abuela cuando enfermaba. Ahora que yo soy madre entiendo el porqué me hacía bebérmelos a diario de dos a tres tazones. La verdad era que me tomaba uno o dos y parecía otra.
Arroz con almejas reales y verduras
Un plato que hago en casa y que cocino a mis hijos porque les encanta, es el arroz con almejas reales y verduras Es sencillito de hacer y los ingredientes que empleo son aquellos que todos solemos tener en nuestra cocina o despensa y que podemos encontrar en cualquier supermercado o tienda pequeñita de barrio. El resultado os encantará y estoy segura que pasará a formar parte de vuestro recetario. Como cena, también es una buena idea. ¡Riquísimo!