¿Aún preparas las salchichas del mismo modo? Toma nota, porque te damos 5 deliciosas formas de cocinar las salchichas:
- Al horno
- A la plancha
- Cocidas
- Guisadas
- A la parrilla o barbacoa
En Alemania, en España, en Italia, en Estados Unidos, en Centroeuropa, norte de África, Latinoamérica… las salchichas es uno de esos embutidos que se preparar prácticamente en todo el mundo. En cada lugar, con un relleno –cerdo, pollo, pavo…- y unas peculiaridades diferentes… con pimentón u otras especias, con ajo o con otras hierbas aromáticas. Y todo, sea como sea, se mete en una fina película de tripa de cerdo, aunque hoy en día ya se fabrican sustitutos sintéticos. Hablamos de un alimento versátil… que podrás preparar de 1.001 formas. Atención a estas 5 formas de preparar las salchichas... ¿cuál te gusta más?
Al horno:
Es una forma estupenda de cocinar las salchichas… con el horno bien caliente, un poquito de aceite y poco más, te quedarán una salchichas jugosas y con todo su sabor. Lo bueno del horno, es que puedes preparar al mismo tiempo su guarnición: unas patatas, cebolla asada, etc.
A la plancha:
Es una de las formas más deliciosas de cocinarlas. No es necesario añadir aceite… aunque es recomendable prepararlas en una sartén antiadherente y solo incorporarlas cuando la sartén esté muy caliente. El fuerte contraste de temperatura, con un calor seco, hará que se concentren los jugos, que el exterior de la salchicha se tueste, y que termine de hacerse con el jugo que vayan soltando… que a su vez se caramelizará. Eso sí, es muy importante pincharlas, para que no revienten durante el cocinado.
Cocidas:
Es la forma de preparar las salchichas más saludable y ligera… por un lado no será necesario incorporar ni una caloría más en forma de aceite, pero además, las salchichas perderán algo de su grasa en el líquido de cocción. Se trata de cocer las salchichas en agua, en vino o en caldo de verduras. Se cuecen pinchadas durante 10 minutos (por eso al pincharlas… parte de su grasa, se queda en el líquido de cocción). Una vez cocidas, se extraen del líquido… con cuidado porque son frágiles y se podrían romper. Las puedes consumir tal cual… o darles una vuelta rápida en la sartén para que adquieran un bonito toque dorado y crujiente.
Guisadas:
Además de prepararlas enteras en el horno o la plancha… las salchichas también se pueden trocear y elaborar un estupendo guiso con ellas. Por ejemplo, ¿Qué te parece unas patatas guisadas con salchichas? También podrás cocinarlas con tomate frito, vino blanco, alguna especia… y conseguir una deliciosa salsa con la que aderezar unos espaguetis o unos macarrones.
A la parrilla o barbacoa:
Las salchichas son un excelente producto para hacer en una barbacoa… lo ideal será optar por salchichas grandes, para evitar que se rompan mientras se cocinan.
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