Níscalos al vino

Los níscalos al vino están realmente buenos y no son muy difíciles de hacer. A mí me recuerdan a muchos platos típicos con vino, pero quizás algo más original porque no se ven tan habitualmente.
Limpiamos bien los níscalos con abundante agua para poder quitarles la tierra. Los limpiamos con un trapito húmedo, sin ponerlos en agua, y les quitamos los tallos dejándolos cortados en rodajas.

Alcachofas con jamón

Las alcachofas con jamón me quedan bien porque las llevo viendo hacerse toda la vida. Es uno de esos platos que ya forma parte del recetario de la mayoría de las cocinas en nuestro país, y es que no es de extrañar, ya que son una absoluta delicia. Un plato estupendo para cualquier momento del día y ocasión.

Sangría Española

Si por una bebida se conoce nuestro país es por la sangría. Esta bebida hecha a base de vino y frutas es la bebida perfecta para tomar cuando hace calor, ya que bien fría es de lo más refrescante. La sangría española es de las bebidas más ricas que hay, por lo que si te apetece, no tienes nada más que ponerte a seguir esta sencilla receta.

Guarnición de patatas con ajo

Me declaro fan incondicional de las patatas en todas sus formas posibles cocinadas (cocidas, asadas, al horno, fritas, en guiso, rellenas, etc.) Cuando alguien viene a casa intento elaborarlas de diferentes maneras porque creo que un buen plato de patatas gusta a todo el mundo y es fácil de acertar. Hace poco una amiga nos ofreció una carne asada con esta deliciosa guarnición de patatas con ajo y he de decir que me encantaron.

Ensalada Valenciana

Lo que caracteriza a esta ensalada valenciana es que está hecha con productos de la mejor calidad procedentes de su huerta. La Comunidad Valenciana se ha hecho famosa por las verduras y hortalizas plantadas en su tierra, que se distinguían por su calidad y sabor, asique cualquier plato hecho con sus productos era garantía de calidad, que es lo que le sucede a esta fresca y sabrosa ensalada.

Pitu de caleya

El pitu de caleya es un plato típico de Asturias, y su nombre no quiere decir nada más que “poyo de aldea”, o como se diría en mi zona, pollo de corral. La mejor forma de prepararlo es guisada, como en la receta que te muestro a continuación, ya que así se consigue que su carne quede tierna y sabrosa.