Recetas con berenjenas

El couscous con pesto y berenjenas es algo diferente del que suelo tomar a menudo, pero me gusta más a decir verdad. SI consigo que el pesto me lo traigan de Italia, ya no te quiero contar lo rica que queda esta receta. En su defecto, lo mejor es hacerlo casero, que queda mucho más rico.
Hay que lavar las berenjenas con abundante agua, secarlas con papel absorbente en daditos lo más pequeñito posibles. Una vez listos, se fríen en una sartén con un poquito de aceite bien caliente.

Lo bueno del arroz es que admite casi cualquier ingrediente para hacer un plato con él. Y no lo digo porque ningún ingrediente de este arroz con champiñones y berenjena sea extraño, sino porque tanto los champiñones como la berenjena hacen que este plato sea de lo más sabroso.

Las berenjenas con bechamel no tienen ninguna complicación y te dejan bien lleno después de comerlas. Esta receta puede ser muy útil para el día a día, así que no te la pierdas.
Lavar con agua abundante las berenjenas, retirarles con un cuchillo los tronquitos y cortarlas longitudinalmente por el medio. Hacerles unos cortes en la carne sin tocar la piel, y pasarlas por harina. En una sartén con aceite bien caliente, freír las berenjenas hasta que estén tiernas. Una vez listas, retirarlas del fuego y dejarlas escurrir boca abajo sobre papel absorbente mientras se enfrían.

Las berenjenas rellenas de verduras con bechamel y queso son el plato estrella de todas las celebraciones en mi casa. La verdad es que están riquísimas y me suele durar como para comer un par de días más, cosa que agradezco bastante.

Llamamos a este plato lasaña de carne, berenjenas y bechamel aunque en realidad no es de todo exacto, ya que no usamos placas de pasta. Podíamos decir que es como un pastel compuesto por deliciosas capas que se van alternando de carne con tomate, berenjenas y deliciosa salsa bechamel.

Las berenjenas rellenas con arroz y morrones de mi madre están riquísimas y alimentan muchísimo. Os dejo por aquí la receta por si os apetece hacerla alguna vez.
Lavar las berenjenas y cortarlas a lo largo. Darles un hervor en un poco de agua con sal hirviendo y escurrirlas bien separando la pulpa.

Harta de comer siempre de la misma forma las berenjenas, se me ocurrió introducir un toque diferente que provocara un contraste de sabores y las convirtiese en algo más interesante, a la vez que apetecible. De ahí surgieron estas berenjenas con vinagre balsámico, un aperitivo delicioso.

Uno de los platos habituales en mi cocina son estas deliciosas berenjenas rellenas de carne al horno, ya que a mis hijos les encantan y yo con tal de que coman verduras y lleven una dieta más equilibrada yo encantada de hacérselo. Sinceramente es un plato muy rico que a todos nos encanta, y bastante sencillo de hacer, por lo que os recomiendo que lo preparéis y ya veréis como todos resultan encantados con él.

Las cremas son un plato muy completo ya que pueden llevar bastantes ingredientes en un mismo plato. Yo la suelo servir como primer plato o como cena y es una buena manera de comer todo tipo de verdura. Os voy a contar como preparar una de mis cremas preferidas, la crema de berenjenas y espárragos. Está buenísima y se hace en un ratito. Os gustará todo de ella.

Si queréis sorprender a vuestros comensales con unas ricas y saludables patatas fritas de berenjena Además, son una manera divertida de que los más peques de la casa coman las tan odiadas verduras.
Para elaborar este plato con trampa, cortamos las berenjenas en rodajas anchas como de 3 o 4 cm. Las dejamos en un recipiente con abundante sal, para que suelten el amargor. Pasadas unas dos horas, procederemos a lavarlas bien en el grifo con abundante agua fría y escurrirlas encima de papel absorbente.