Tarta de galletas y dulce de leche
Cogemos una estructura plana donde posar la tarta y ponemos una primera capa de galletas, mojadas previamente en leche y canela. No tienen que estar mucho tiempo, es simplemente un vuelta y vuelta. Esta primera capa será la base de la tarta. Montamos la nata con el azúcar, y echamos una capa de nata encima de la base de galletas. Luego volvemos a mojar las galletas en la leche y ponemos otra capa encima de la nata. Podéis hacer tantas capas como queráis, dependiendo también del número de personas que coman la tarta.
Fettuccini con nata y beicon
Los fettuccine con nata y beicon es un plato muy típico en la cocina italiana. Yo, que nunca antes la había probado, cuando lo hice me encantó y yo que antes veía la pasta como un plato lineal aderezada siempre con los mismos ingredientes, cambié de opinión. Además es muy saciante y tras comerla no necesitaréis un segundo plato. ¡Es muy completo!
Lo primero que haremos será poner una olla con agua a cocer con un pelín de aceite, sal, laurel y un pelín de orégano.
Trenza de beicon y cuatro quesos
Os voy a dar la receta de trenza de beicon y cuatro quesos. Me encantan los hojaldres dulces pero los salados son mis preferidos. Además los encuentro una forma rápida de cocinar un entrante o aperitivo cuando tienes una cena o unos invitados sorpresa. Solo es coger el hojaldre, rellenarlo y trenzarlo, horno y listo. El hojaldre admite todo tipo de ingredientes por eso le pongamos lo que le pongamos, está riquísimo. Comenzaremos por extender la lámina de hojaldre, colocar el beicon en tiras dejando todos los bordes libres y vamos a poner encima el queso rallado.
Caipiroska de fresa
La caipiroska es un coctel que se prepara con vodka, zumo de lima y azúcar. De por sí ya está buenísimo, por lo menos a mí me encanta, pero si le añadimos unas fresas trituradas lo convertimos en unas deliciosas caipiroska de fresa.
Fondue tradicional de queso
Los franceses han aportado a nuestra cocina grandes platos, como las quiches o las fondue de queso. A mi esta última siempre me ha parecido, además de un aperitivo delicioso, una de las formas más divertidas de comer. Eso de bañar desde tozos de pan a carne o verduras en una salsa de queso me parece un gran invento. Si queréis probarla, aquí os dejo la receta de una fondue tradicional de queso.
Arroz cocido
Muchas veces el ritmo de vida que llevamos, nos lleva a alimentarnos mal ya que cuando llegamos a casa cansados no nos apetece cocinar y cuando estamos trabajando, preferí comer cualquier cosa. Como remedio a ello, os voy a contar la receta de arroz cocido que nos es muy útil a las que nos encontramos en esa situación, tan estresante a veces. Además está riquísimo, así que a las personas que están en contra de la comida recalentada, ya no tenéis excusas.
Chocolate artesano navideño
Bombones, mazapanes, polvorones y como no, turrones. Estos son los dulces que solemos comer sin parar en la época de navidad. De todos estos, el que en casa se come sin parar, es el chocolate artesano navideño, que suelo elaborar durante las tres semanas de navidad e incluso alguna que otra antes. Esta receta ya la comía cuando yo era pequeña y era mi madre quien nos elaboraba este dulce. Que delicioso, tanto o más que los que compramos en los supermercados.
pastel de cabello de ángel
Siempre me resulto increíble que de una verdura como la calabaza se obtuviera un dulce tan delicioso como el cabello de ángel. Se puede comer de muchas maneras, pero como más me gusta es haciendo un pastel de cabello de ángel, algo tan sencillo como rellenar una masa de hojaldre con este dulce. Sencillamente delicioso.
Arroz blanco con ajo y perejil
El arroz blanco con ajo y perejil es una guarnición perfecta para comer con cualquier guiso. Por ejemplo con un pollo al curry o agridulce, si lo hacemos con comida asiática, o con unos chipirones rellenos. La verdad es que si quieres incluso lo puedes comer servido como primer plato.
Galletitas bañadas en chocolate
No hay nada mejor que tomar a media tarde una buena taza de té y comer mientras unas buenas galletitas bañadas en chocolate. A mí me encantan, aunque las de hoy están tan ricas que no me puedo resistir a comerlas entre horas, bueno ni yo ni mi familia, por lo que en cuanto las hago, desaparecen.