Migas con Panceta y Chorizo

Un plato muy típico de mi pueblo y zona son las migas con panceta y chorizo. En la antigüedad era un plato que comían los pastores en sus largas jornadas por el campo y caminos manchegos. En la actualidad es un plato que se come en reuniones familiares alrededor de la propia sartén donde se cocinan. Es un plato muy saciante y que después de comerlo no te apetecerá de comer en horas.

Croissants calentitos

Una mezcla que me encanta en cocina es lo dulce y lo salado. Me encanta mezclar comidas dulces y saladas ya que en boca quedan estupendas y el sabor que deja hace que quieras comer más y más. Uno de estos alimentos que me gusta mezclar, sobre todo con jamón york o jamón dulce son los croissants calientes de los cuales os traigo la receta. Yo los suelo servir en cumples o en cenas con amigos y siempre desaparecen en primer lugar, por lo tanto es señal indiscutible de que gustan.

Berenjenas trituradas para el invierno

Un plato que hago mucho en los días de frío, son las berenjenas trituradas para el invierno. Como ya os he dicho, este plato lo suelo cocinar cuando hace frío, en verano casi nunca, por no decir nunca, lo he cocinado. Está muy rico y es muy saciante y reconfortante. Os voy a decir cómo prepararlo y espero que os animéis a hacerlo en casa. En primer lugar se cuecen las berenjenas en una bandeja de acero, sobre el horno. Esta dura máximo una hora, pero debo torcer las berenjenas de un lado para el otro lado para que se cuezan bien.

Faisán al Foie y al Oporto

Una de las carnes más especiales que hay es la del faisán, de un sabor delicioso e indescriptible, lo que la hace perfecta para comidas un poco especiales, y sobre todo si se hace con recetas tan deliciosas como esta de faisán al foie y al oporto. Queda delicioso guisado en la salsa de foie y oporto, dos sabores que maridan perfectamente.

Croquetas de bacalao con patatas

Hoy os traigo una receta de croquetas de bacalao con patatas. En casa es una de receta de aprovechamiento a las que acudo para aprovechar las pechugas que sobran del pavo asado o del pollo o del cocido. Se pueden hacer de casi cualquier cosa ,además se pueden preparar en grandes cantidades y congelarlas ya que en el congelador nos aguantan meses y meses y recurrir a ellas para salir de un apuro. Son muy fáciles de cocinar y vienen de lujo para dar salida a los restos de comida que nos quedan y que nos da pena.

Samosas

Para hacer el relleno de las samosas hay que echar un poco de aceite en una sartén y freír la carne picada. Cuando está hecha, se aparta de la sartén y, ahí mismo con un poco más de aceite se fríen el comino y el cilantro durante media hora.
Pasada la media hora, se añade la carne picada a la sartén junto con la cebolla, el tomate y la guindilla, todo ello picado, y se dejan sofreír un poco antes de echar la media taza de agua. Una vez que está todo dentro de la sartén, se deja a fuego lento hasta que el agua se consuma y se retira.

Crema de Langosta

Los días que hay algo que celebrar en mi casa, ya sea un cumpleaños o una fiesta, la comida se empieza con esta sabrosísima crema de langosta. La receta es muy sencilla, y aunque este sea un crustáceo un poco caro, de vez en cuando merece la pena hacer un pequeño esfuerzo y permitirnos estos pequeños caprichos.

Mi-cuit de pato (foie gras)

Un plato que para mí es una auténtica delicatesen, es el mi cuit de pato (foie gras). El mi cuit está elaborado a base de hígado de pato o ganso y que su textura puede parecerse a la del foie-gras pero mucho más prestigioso. Está riquísimo y la fruta como la manzana, le va genial.
Para elaborarlo, vamos a pelar las manzanas y las partiremos en cuatro gajos quitándole el corazón. Cada gajo lo hacemos a láminas.

Empanadillas de pollo

Me encantan las empanadillas de pollo porque, en general, me gusta todo lo que vaya dentro de este tipo de masa.
Para hacer el relleno hay que hervir el pollo en una cacerola con agua y un puñadito de sal. Una vez esté tierna la carne, sacar el pollo del agua y cortarlo en trozos pequeños.

Espinacas a la crema a mi manera

Una forma de comer verduras, si no te gustan las verduras, es cocinarlas "escondidas" en otro plato o con otros alimentos que disimulen su sabor. Estas espinacas a la crema es el claro ejemplo de un plato así. Era la técnica que utilizaba mi madre para conseguir que yo me comiera las verduras y ahora es la técnica que utilizo yo.
En primer lugar lo que tenemos que hacer es cortar los tallos de las espinacas y lavarlas en abundante agua fría. Después las escurriremos. Mientras, vamos a picar la cebolla.