Lubina rellena de verduras al horno
Esta lubina rellena de verduras al horno es una auténtica delicia que no se puede hacer todos los días porque no es de lo más barato, pero vale la pena.
Hay que abrir la lubina por la mitad, sazonarla con la sal y la pimienta, y untarla con el aceite de oliva.
Brocheta de bonito a la parrilla
Esta brocheta de bonito a la parrilla tiene un sabor fuera de lo normal, te lo puedo asegurar, y, además, es buenísima en un montón de propiedades. Si te gusta este tipo de pescados, te recomiendo que pruebes y me digas a ver qué te parece.
Limpiar el bonito, a no ser que no te lo haya hecho el pescadero, y cortarlo en dados al gusto, cómodos para comer directamente con la boca.
Contramuslos de pollo rellenos al horno
El pollo es una carne que nos permite cocinarla de mil maneras diferentes y que acepta casi cualquier tipo de ingredientes, siempre esta buena. Unos de mis platos que más me gustan, donde el pollo es el protagonista, son los contramuslos de pollo rellenos al horno. Es un plato que hemos comido toda la vida pero que está increíblemente bueno. No podéis perder la oportunidad de comerlos una y otra vez.
En primer lugar, en una fuente de horno pondremos las patatas peladas, lavadas y cortadas a rodajitas de 1 centímetro aproximadamente de grosor.
Puding de calabacín
No sé a tus hijos, ni siquiera sé si tienes hijos, pero los míos llevan fatal comer verdura, así que siempre me estoy inventando cosas para que no vean los que están comiendo. Me he inventado puding de calabacín, lo mismo te resuelve problemas también a ti.
Pela el calabacín, quítale las pepitas y córtalo en trozos muy pequeños. Pela la zanahoria y rállala, y pela el puerro y pícalo en trozos finos. Sazona todas las verduras a tu gusto antes de meterlas a pochar en una cacerola con un poquito de aceite de oliva. Cuando estén listas, retíralas del fuego.
Pitu de caleya
El pitu de caleya es un plato típico de Asturias, y su nombre no quiere decir nada más que “poyo de aldea”, o como se diría en mi zona, pollo de corral. La mejor forma de prepararlo es guisada, como en la receta que te muestro a continuación, ya que así se consigue que su carne quede tierna y sabrosa.
Tortilla de calabacines super fácil
No hay nada más fácil que hacer una rica tortilla de calabacines. Solo tienes que pochar bien unas verduras, añadirlas huevo, condimentar a nuestro gusto y hacerlo todo junto en la sartén. Si quieres saber los pasos de una manera más detallada, lee la receta que te relato a continuación. Te saldrá una tortilla estupenda.
Tarta de calabaza
Esta tarta de calabaza está riquísima y es bastante diferente a las tartas que se suelen hacer en los cumpleaños o en los eventos en los que hay algo que celebrar. Así que, ya sabes, apúntate la receta y sorprende a tus amigos.
Ponemos la lámina en un molde y la pinchamos para que no se infle cuando esté el horno. La cubrimos con papel aluminio y la metemos al horno durante 10 minutos a 160º. Una vez lista la masa de la tarta, se quitamos el papel y la metemos otros 7 minutos en el horno.
Tortilla de pimientos (Microondas)
Echar en la tortilla de patata pimientos ya es un clásico. Alguna vez que hemos hecho tortilla hemos hecho la prueba. La novedad de esta receta de tortilla de pimientos es que las verduras las pochamos en el microondas, con el ahorro de uso de grasa y tiempo que eso supone, en lugar de en la sartén. Os aseguro que queda igual de rica.
Gambas con Robellón
Las gambas con robellón son una receta de fin de semana. Necesitamos tiempo para hacerlas y tiempo para comerlas, más la siesta. Realmente, son una delicia, ya no porque la mezcla sea exquisita, sino porque no es un plato típico y soprende.
En primer lugar, rallamos los tomates y picamos las cebollas, los pimientos y los ajos en trocitos muy pequeños para no encontrar tropezones en la salsa.
Berenjenas con bechamel
Las berenjenas con bechamel no tienen ninguna complicación y te dejan bien lleno después de comerlas. Esta receta puede ser muy útil para el día a día, así que no te la pierdas.
Lavar con agua abundante las berenjenas, retirarles con un cuchillo los tronquitos y cortarlas longitudinalmente por el medio. Hacerles unos cortes en la carne sin tocar la piel, y pasarlas por harina. En una sartén con aceite bien caliente, freír las berenjenas hasta que estén tiernas. Una vez listas, retirarlas del fuego y dejarlas escurrir boca abajo sobre papel absorbente mientras se enfrían.