Guiso de rape
Este guiso de rape es bastante sabroso, acompañado de marisco, que me encanta. Creo que el marisco da mucho sabor a una receta y se puede añadir a casi todo. Además, me encanta la textura del rape y creo que es un pescado muy aconsejable para darle a alguien que no le guste mucho lo que venga del mar.
Limpiamos el rape y lo cortamos en rodajas. Lo sazonamos a nuestro gusto, tanto de sal como de lo que queramos, y lo reservamos para más tarde.
Truchas a la navarra
Un rico y sano pescado azul y una receta típica de nuestro país. ¿Te apetece? Especialmente en el norte de España se estilan variadas versiones y tú puedes hacer la tuya propia. Como complemento clave de la trucha a la navarra, el jamón, que le aporta el toque ideal y enriquece mucho su sabor. Es un plato estupendo para quienes no son muy cocinillas pero quieren aprovecharse de las ventajas nutritivas de un producto como el pescado.
Paso 1:
Pavo asado relleno
El pavo asado relleno es muy típico en mi casa porque nosotros celebramos el día de Acción de Gracias, porque parte de mi familia es americana. Mi madre, que es española, se ha adaptado a las tradiciones americanas y ahora le queda un pavo de caerte al suelo.
Amasar bien los picadillos de carne junto con los dos huevos, el vasito de jerez y las especias, y se deja reposar para que se impregne bien de sabor durante unas horas. Se remojan con el jerez las frutas secas, es decir, las pasas y las ciruelas, al menos una hora.
Enchirimoladas
Las enchirimoladas me las enseñó a hacer una amiga mexicana y para mí son los canelones españoles. Yo creo que os van a gustar bastante.
Poner una cacerola en el fuego un poco de aceite y, cuando esté bien caliente, freír los tomates con el chile echándoles la sal al gusto.
Poner en la licuadora el ajo y la cebolla, y molerlos salándolos al gusto. Se vuelve a sazonar la mezcla de tomates y chiles con un poco de la cebolla y los ajos, y algo de aceite. Por último, se agrega medio litro de agua y se deja cocer.
Solomillo al whisky
Si vas a hacer solomillo al whisky, lo único importante es que la carne sea muy buena para que se disfrute mucho más.
En primer lugar, hay que preparar los solomillos, y para ello hay que condimentarlos con la sal y la pimienta al gusto. Una vez listos, poner una sartén al fuego con la aceite para que se caliente y sellar los solomillos al gusto de cada uno, dependiendo de si se quiere la carne más o menos hecha.
Flamenquín de pollo
El flamenquín de pollo es una especie de san Jacobo, pero hecho con pechuga de pollo y enrollados. Es un filete delicioso, con su relleno de jamón y queso y después un fantástico empanado, aunque bastante consistente, por lo que si estamos a dieta no es muy aconsejable comerlo. Cortamos las pechugas de pollo en filetes finos, que luego pasaremos a aplastar para que queden lo más finos posibles. Los extendemos y se sazonan. Colocamos encima el queso y después una loncha de jamón. Ahora los enrollamos y se empapan con huevo batido y a continuación los pasamos por el pan rallado.
Huevos con atún y cebolla
Este plato de huevos con atún y cebolla es muy sencillo de hacer, además de que es una receta idónea para una noche de entre semana que llegamos muy cansados y no nos apetece cocinar. En general, mis recetas están pensadas para eso porque vivo sola y no tengo tiempo de nada.
Alitas y muslos agridulces
Conozco un bar en mi barrio en el que te ponen muchas alitas y muslos de pollo agridulces cada vez que pides una caña. Como soy una aficionada pero no soy rica, he decidido hacerlas yo misma. Aquí os dejo la receta para que la disfrutéis.
Mezclamos la salsa de soya junto con el jugo de limón, la miel de ajo y la cebolla y la pimienta blanca en un bol. Lo mezclamos bien para que los ingredientes se integren perfectamente y cojan los sabores unos de otros.
Cerdo horneado
Estuve viviendo en Honduras un año por el trabajo de mi marido y me dediqué a aprender la cocina típica de allí para dedicarme a dar clases cuando volviera, ya que me encanta la cocina en general. Uno de mis platos favoritos es el cerdo horneado hondureño, que espero que os guste si nunca lo habéis probado.