Costillas de cerdo jugosas

1. Echaremos aceite de girasol en la base de una sartén a fuego fuerte y cuando esté caliente ponemos medio kilo de costillas de cerdo. 2. Dejaremos que se dore tal cual un par de minutos. 3. A continuación salaremos al gusto y pondremos perejil, ajo en polvo, tomillo seco y una hoja de laurel. 4. Cuando terminemos de condimentar las costillas, echamos por encima medio vaso de vino tinto. 5. Dejaremos que se haga un minuto más por este lado y daremos la vuelta a las costillas. 6. Iremos dándoles la vuelta cada cierto tiempo hasta que la carne se haya hecho y el vino se haya reducido. 7.

Pollo al ajillo

Compramos un pollo entero troceado en la carnicería (mejor si es pollo campero, que es más sabroso).

Limpiamos bien el pollo, quitándole la piel para que no tenga tanta grasa. Salpimentamos y sofreímos en una sartén con un poco de aceite.

Mientras tanto, picamos los ajos en trocitos y los añadimos a la sartén.

Lo dejamos cocinar a fuego moderado hasta que esté doradito, dándole vueltas de vez en cuando para que no se pegue. Cuando esté listo retiramos el exceso de aceite para que no quede muy aceitoso.

Rollo gitano de la abuela

Cada vez que paso por una pastelería se me van los ojos detrás de las tartas, en especial de los rollos o brazos de gitano, porque me recuerdan a uno que hacia mi abuela y que no hemos conseguido olvidar. Es un dulce que se sigue haciendo e mi casa, aunque la mano para los postres no hemos conseguido heredarla ninguno. De todas maneras si tú quieres robar este rico rollo gitano de la abuela, aquí te dejo la receta. Pruébalo y ya verás lo bueno que está.

Se pone a calentar el horno a 180º.

tarta de maíz

La tarta de maíz es una tarta deliciosa que consiste en un bizcocho esponjoso hecho al horno. La masa con la que se hace tiene una mezcla de quesos, que realza su sabor, y queda deliciosa.

Albóndigas en tomate casero

Un plato que me encanta y que comía desde que era niña eran las albóndigas en tomate casero de mí abuela. No he comido albóndigas más ricas que esas y es que, imagino que como todas nuestras abuelas, mi abuela era una gran cocinera. Cada vez que como este plato, me hace regresar a mi niñez y eso es algo que me encanta. Os voy a contar como elaborarlas para que vosotros los hagáis también en casa. Espero que os gusten tanto como a mí. Para las albóndigas. Pondremos la carne picada en un bol. Picaremos la cebolla y los ajos muy finos y añadimos a la carne.

Mermelada de Manzana

Qué buena está la fruta de temporada, ¿verdad? A mí me encanta comerla directamente del árbol o de la planta y por suerte de mucha de ella puedo disfrutar ya que mis padres tienen algunos frutales y plantas que todos los años nos dan este placer. Un árbol que tiene muchísimos años es un manzano que da montones de manzanas y por muchas que comemos y regalamos, todos los años algunas se caen y otras se pudren. Para poder aprovechar la mayoría de ellas, elaboro mermelada de manzana que está muy rica.

Albóndigas de patatas rellenas con ciruelas

Si queréis variar a la hora de crear diferentes aperitivos que servir en vuestra mesa cuando tengáis una fiesta o comida especial, os propongo esta receta de albóndigas de patatas rellenas con ciruelas. Son unos pequeños bocaditos de los que no te esperas la sorpresa del interior al darles el primer bocado, convirtiendo que en tu boca se produzca una explosión de sabor al mezclar el sabor de la patata con el dulce de la ciruela. Deliciosos.

Sopa minestrone

Sopas de verduras hay muchas, pero sopa minestrone… solo una. Se trata de uno de los platos más clásicos y tradicionales de la cocina italiana. Una sopa espesa, contundente, reconfortante. Si, la minestrone es una sopa…. Sin embargo estamos ante un plato muy sano y muy completo… que perfectamente te puede solucionar una cena como plato único.  El secreto está en servirla con una generosa cantidad de queso parmesano.

Paso 1:

Sofrito de pollo con verduras "a la franchesca"

  1) Enjuagar el pollo y cortarlo a cachitos (cuadraditos).

  2) Pelar las patatas y cortarlas a rodajas, no muy gruesas pero tampoco tan finas.

  3) Enjuagar la verdura y repetir el procedimiento. Cuanto más pequeñas, mejor, pues se harán mejor y serán más fáciles de digerir después.

  4) Bañamos la sartén en aceite de oliva virgen extra (no demasiado; que complete el molde del utensilio).

  5) Aplicamos una pizca de sal y el cardamomo.

  6) Encendemos la placa y dejamos que caliente durante un minuto (que no empiece a freír todavía).

Mayonesa de limón casera

Una de las salsas más utilizadas en todo el mundo y que forma parte de mucha de nuestras comidas o guarniciones es la mayonesa. Yo, aunque intento no abusar de ella debido a su alto aporte calórico, si que me gusta comerla con algunos platos o guarniciones. Cuando la como, intento que sea elaborada por mí misma pero a veces me resulta muy aburrida y me gustaría probar otras salsas, lo que pasa que soy un poco delicada en ese tema.