Pisto a la francesa

El pisto a la francesa que hago yo es al modo en el que lo hacía mi amiga francesita cuando vivíamos juntas, de ahí su nombre. Espero que os guste muchísimo porque esto, junto con la quiche, es lo único que aprendí bien.

Huevos a la francesa

Los huevos a la francesa servidos en un buen pan, que sea lo más rústico que se pueda, quedan increíbles. Son muy sencillos de hacer, de hecho a mí me sirvieron mucho cuando estuve de Erasmus, que era yo una canija.
Los huevos deben ser bien frescos para que queden más ricos. Se pone una cacerola en el fuego y se echa por cada litro de agua una cucharada de vinagre. Se cascan los huevos de uno en uno en una taza y se van echando en la cacerola con mucho cuidado.

Cebollitas francesas glacé

Estas cebollitas francesa glacé son la guarnición perfecta para un montón de tipos de plato, ya sea pescado o carne. La verdad que no podría escribir el número de veces que las he hechos para acompañarlas de algo así, así que te puedo asegurar que quedan riquísimas.
Pelar las cebollitas y ponerlas en una cacerola en el fuego con la manteca. Colocarlas de forma que no se superpongan unas sobre otras, haciendo que todas ellas toquen el fondo de la olla. Agregar el azúcar y la sal a la cacerola, y, por último, echar el caldo.

Pan de especias francés

La receta que os traigo hoy es la de un estupendo pan de especias francés , que es realmente delicioso. Es perfecto para comer a media tarde con un buen café o a la hora del desayuno untado con un poco de mantequilla. Uno de los dulces más exquisitos que probareis.

Pan dulce navideño francés

El pan dulce navideño frandes son un dulce que encontramos todo el año en supermercados pero que su consumo se eleva, sobretodo, en la época de navidad. Este postre es un pan dulce con masa tipo brioche que puede ir relleno de trufas, frutos secos o pepitas de chocolate o solo. Están muy ricos. Os cuento como hacerlo en casa.

Crema de lechuga a la Francesa

En nuestro país no consideramos preparar la lechuga en otra cosa que no sea en una ensalada, mientras que en países como en Francia llevan años preparando estupendas y deliciosas cremas. Esta crema de lechuga a la Francesa es una estupenda manera de empezar cualquier comida, ya que posee un sabor delicioso y sobretodo novedoso a la hora de hacer una crema. Espero que os guste tanto como a mí.

Sopa de cebolla clásica francesa

Uno de los platos más típicos de la cocina francesa y más desconocidos en este país es la sopa de cebolla. Es una sopa de sabor intenso y rematado por un excelente gratinado de queso. Si no la has probado hasta ahora, y sientes a curiosidad, te animo a que hagas esta receta de sopa de cebolla clásica francesa que te enamorara. Es sencilla no sólo en la elaboración, sino también en los ingredientes.

Torta de chocolate francesa

Esta torta de chocolate francesa es muy típica en mi casa, ya que mi familia es de Francia, y a mí me gusta mucho hacerla y más comerla.
Picar el chocolate y colocarlo dentro de una cacerola con la mantequilla derretida, la leche, el azúcar, la fécula de maíz, la vainilla y la canela. Poner el fuego bajo y fundir el chocolate removiendo constantemente con una cuchara de madera para conseguir que quede una crema un poco espesita.

Manzanas rellenas con jengibre a la francesa

En mi casa uno de los postres habituales en otoño e invierno eran las manzanas asadas, que dependiendo de las ganas de mi madre de cocinar, podían ser rellenas o no. Con los años he seguido haciéndolas o en casa, aunque siguiendo recetas un poco más elaboradas, como esta de manzanas rellenas con jengibre a la francesa. El jengibre les aporta ese toque picante tan característico, y junto al resto de ingredientes hace que estén mucho más ricas.

Solomillo de ternera asada a la francesa

Si quieres un plato con el que impresionar, aquí te traigo uno que es absolutamente delicioso. Es un solomillo de ternera asada a la francesa, con el que tanto tu como tus comensales os chupareis los dedos. La caerme queda espectacular, al igual que la salsa que es estupenda. Es el claro ejemplo de que para conseguir paltos espectaculares no es necesario ser un cocinero profesional.