Pechito de cerdo agridulce con batatas doradas al micro

Para comer pechito de cerdo agridulce hace falta un día en el que no haya nada que hacer y podamos compartirlo con otras personas, ya que vale la pena. Es un poco elaborado, por tanto hay que tomarse un tiempo, pero el resultado lo dice todo.
En primer lugar, limpiar el pechito si tiene mucha grasa y ponerlo en una fuente que se pueda hornear. Untarlo con la salsa barbacoa y la miel, y echar la sal y la pimienta a nuestro gusto, dependiendo de cómo guste comer las cosas.

Somillo de cerdo mechado con dátiles y naranja

Una carne que me encanta comer debido a que no contiene huesos ni demasiada grasa, es el solomillo. En casa lo solemos comer muchos domingos y nos encanta de todas las maneras posibles. Yo lo suelo cocinar con salsa de pimienta, de piña, acompañado de una rica guarnición al Pedro Ximénez, ... Pero la receta que más gusta es un rico solomillo de cerdo mechado con dátiles y naranja y pimientos rojos. Es sencillo y está riquísimo.
En primer lugar tenemos que limpiar los solomillos de grasa y telillas.

Milanesa con patatas fritas

La milanesa con patatas fritas es un plato súper típico y que te salva en más de una ocasión la comida o la cena, sobre todo si tienes niños. Para tomar realmente rico este plato, lo mejor es hacerlo en casa para que no sea tanta fritanga y se sienta el sabor de los ingredientes.

Costillas de ternera en salsa

Hasta que me proporcionaron esta receta, yo siempre había comido las costillas estofadas, al horno o a la parrilla, pero desde que probé esta receta de costillas de ternera en salsa, no la cocino de otra manera que no sea así. Son muy fáciles de elaborar y el resultado es magnífico.
Lo primero que vamos hacer será tomar las costillas a las que le vamos a echar pimenta molida, orégano molido, adobo al gusto y sazonaremos con achiote. Con esto las adobaremos y las colocaremos en un recipiente durante unos 30 minutos.

Muslo de cerdo a la sartén

Una carne que me encanta comer debido a que no contiene mucha grasa y a la jugosidad con la que queda después de cocinarlo, es el muslo del cerdo. En casa lo solemos comer muchos domingos y nos encanta de todas las maneras posibles. Yo lo suelo cocinar con salsa de pimienta, de piña, acompañado de una rica guarnición al Pedro Ximénez, ... Pero la receta que más gusta, es la más sencilla: un rico muslo de cerdo a la sartén. Es sencillo y está riquísimo.
En primer lugar se pone una cuchara de aceite al sartén, se deja calentar hasta que empieza a burbujear.

Manitas de cerdo con coñac

Un plato de la casquería que adoro, son las manitas de cerdo al coñac que siempre se ha comido en casa. Durante mi niñez, todos los eneros, se realizaba una matanza de dos o tres cerdos que nos daba sustento para todo un año y más. De todo lo que se elaborada, lo que antes se gastaban eran las manitas de cerdo que se limpiaban muy bien. Os cuento como elaboraba mi abuela este plato y espero que os gusten mucho, mucho.
En primer lugar, vamos a poner a cocer las manitas junto a todos los ingredientes como son la cebolla y el tomate pelados, y la cabeza de ajos tal cual.

Cerdo tropical

Cuando mi abuelo me decía que del cerdo se come todo, ¡qué razón tenía! Es un animal del que nunca se desprecia nada, todo vale o para un buen guiso, asado o para elaborar un rico caldo. La parte que a mí más me gusta del cerdo son las partes más magras y las chuletas. El plato que os voy a decir cómo preparar es un exquisito cerdo tropical que hace una buena amiga mía. Este plato me gusta mucho ya que la carne queda muy tierna y jugosa. ¡Me encanta la sensación de que se me deshagan en la boca!