Salsa de mandarina

Para los que nunca la hayáis probado, os aconsejo esta salsa de mandarina para que acompañe cualquiera de vuestros platos de carne. Con el pollo es un auténtica delicia, ya que a esta carne le va muy bien cualquier sabor cítrico. La verdad es que es una salsa muy fresca, y por ende deliciosa.

Ternera picada en salsa picante de pimientos rojos

Esta receta de ternera picada en salsa picantes de pimientos rojos es perfecta para añadirla a una pasta. Sería parecido a hacer la pasta con salsa boloñesa pero algo más picante.
Pon una sartén con aceite en el fuego y, cuando éste esté bien caliente, echa los pimientos y la cebolla, los dos picados finamente, a rehogar. Déjalos pochar y dorarse, y, entonces, añade la carne picada junto con los ajos, picados también. Mézclalo todo muy bien para que los sabores se integren y déjalo cocinar ligeramente a fuego medio.

Mermelada de calabaza y zanahoria

Una mermelada, sí, porque es dulce, pero nada convencional: con sabor de calabaza y zanahoria. ¿Aún tienes dudas? ...pruébala y te convencerás.

Paso 1:

Pela la zanahoria. Pela también la calabaza y quítale las pipas. Córtalos en dados.

Paso 2:

Corta la vaina de vainilla a la mitad (a lo largo) y raspa su contenido. 

Chutney de mango

El chutney es un acompañamiento típico de la cocina india. Se trata de una especie de confitura agridulce… sorprendente y deliciosa. Nos ayudará a dar un toque exótico a platos como un foie micuit, un solomillo de cerdo o cualquier plato al que le pegue una salsa agridulce.

Paso 1:

Pela y pica los mangos en trozos grandes quitando el hueso central. Pica la cebolla muy finita y ralla el jengibre.

Paso 2:

Tapenade

El tapenade es una receta típica del sur de Francia, una especie de paté de aceitunas negras que puede tomarse solo, como aperitivo, untado en tostas, o bien puede servir como base para preparar vinagretas para alguna pasta, carne o pescado.

Paso 1:

Pela el ajo, y escurre el agua de las aceitunas, de las alcaparras, así como el aceite de las anchoas. 

Paso 2:

Puré de patatas con ajo

Para hacer este puré de patatas con ajo economizando el tiempo, ve encendiendo el horno y calentándolo a 200º para que esté perfecto a la hora de necesitarlo.
Empieza rociando con aceite el ajo y envuélvelo en papel de aluminio. Mételo al horno y ásalo unos 30 o 40 minutos, hasta que esté blandito. Sácalo entonces y déjalo enfriar. Cuando ya está a temperatura ambiente, apriétalo hasta sacarle la piel, y mételo a la nevera.

Crema pastelera

Constituye el corazón de numerosos postres como canutillos, brazos de gitano, milhojas, lionesas, cañas, tartas de frutas, buñuelos de viento… toma nota de esta receta y, cuando la domines, tendrás mucho terreno ganado en el mundo de la repostería.

Paso 1:

Mezcla enérgicamente el azúcar, la harina, el extracto de vainilla o el interior de la vaina de la vainilla y las yemas en un bol con la ayuda de unas varillas.

Paso 2:

Acerca, en una olla amplia, la leche al fuego y cuando rompa a hervir, retira del fuego.

Patatas a las brasas

Las patatas a la brasa, para mi gusto, son las más ricas y las más sanas también. Cierto es que no siempre se pueden hacer, porque no cae una barbacoa del cielo a menudo, pero cuando se puede, yo las disfruto muchísimo.
Se limpian bien las patatas bañándolas en abundante agua para quitar las impurezas, y se envuelven en papel de aluminio.