Caracoles a la aragonesa
Los caracoles, o te gustan o no te gustan. Por su textura e imagen, no son muy agradables a todos los paladares, pero he de decir que son una delicia. Si tienes hijos pequeños no creo que te vayan a hacer la ola ese día pero si tienes una comida con amigos es una buena elección, original y sabrosa.
Caldo de pescado
Un buen caldo de pescado con un poquito de pan acompañando es el plato perfecto para los días lluviosos de invierno.
Ponemos a cocer las cabezas y la cola de pescado en una cacerola con agua con sal, ajo y cebolla, y lo dejamos cocer. Ya listo, lo colamos y lo volvemos a salar.
Berenjenas con pollo y beicon
Un plato muy tradicional que estoy segura que hemos comido todos y que es una buena manera de comer verduras son las berenjenas con pollo y beicon. Son muy sencillitas de elaborar y el resultado es increíble. Yo las suelo hacer cuando tengo tiempo y además hago de más porque las congelo y así las tengo a mano cada vez que las necesito.
Brownie de chocolate con nueces casero
Seguro que si buscas encontraras miles de recetas de brownies, pero os aseguro que ésta de brownie de chocolate con nueces casero que os traigo es una de las mejores que probareis en vuestra vida. Este es un postre delicioso que a todo el mundo le encanta, por lo que siempre que lo hagas tendrás un éxito asegurado.
Ensalada de pollo y bacon con aguacate
Las ensaladas nos permiten dejar volar la imaginación. Permiten añadirles miles de ingredientes como carnes, frutos secos, quesos o frutas. Son muy saciantes por lo que podemos utilizarlas en una alimentación equilibrada y cuidada. La ensalada que os voy a contar es una ensalada de pollo y bacón con aguacate. Es muy sencilla y rápida de hacer.
Receta de Pastel de patatas
Una forma de comer verduras o algún ingrediente que no os gusten es cocinarlos a "escondidas" en otro plato o con otros alimentos que disimulen su sabor. Este pastel de patatas es el claro ejemplo de un plato así. Era la técnica que utilizaba mi madre para conseguir que yo me comiera las verduras u otros alimentos que no me gustaban y que ahora es la técnica que utilizo yo. En primer lugar vamos a hervir las patatas peladas. Cuando estén cocidas y blanditas, vamos a cortarlas y a hacerlas puré.
Pan de hierbas y queso
Disfrutar de pan hecho en casa es algo muy sencillo, ya que es algo muy fácil de hacer. Solo tienes que ponerte con las manos en la masa, y listo. Esta receta que te traigo hoy es una de pan de hierbas y queso. No es un pan en sí, sino unos grisines o colines de pan, para comer antes o durante las comidas, su sabor es riquísimo.
Comenzamos a preparar la receta poniendo en un bol la harina, la sal, el consomé de pollo en polvo, romero, eneldo, salvia, cebollín y las tazas de queso. Lo mezclamos bien.
Costillar de cerdo crujiente al Pedro Ximenez
Hasta que me proporcionaron esta receta, yo siempre había comido las costillas estofadas, al horno o a la parrilla, pero desde que probé esta receta del costillar de cerdo crujiente al Pedro Ximénez, no la cocino de otra manera que no sea así. Es muy fácil de elaborar y el resultado es magnífico.
Lo primero que haremos será partir el costillar en dos o separar todas las costillas (a libre elección). Después vamos a poner en una bandeja para horno. Lo vamos a untar con un poco de aceite, lo salpimentaremos y lo vamos a espolvorear con romero.
Puding de calabacín y zanahoria
Este punding de calabacín y zanahoria te viene muy bien para comer verduras de una forma diferente, quizás más apetitosa y que llena bastante, por lo que tienes una comida muy completa para afrontar el día con energía.
Lavar bien los calabacines, quitándoles los extremos, y cortarlos en trozos. Aparte, pelar y cortas la zanahorias en rodajas. En una cacerola con agua, hervir las verduras hasta que estén blanditas.
Brownie con helado de vainilla
Un postre o dulce que descubrí por el 2010 fue el brownie con helado de vainilla. La primera vez que lo probé fue en mi época universitaria cuando un amigo me invitó a cenar a un restaurante de comida americana. Cuando el camarero me lo puso delante, caliente y junto a una gran bola de helado con más chocolate caliente por encima, pensé que eso a mí no me iba a gustar y que aun menos, me iba a sentar bien. Pero no fue así y es que literalmente, me puse las botas. Me lo comí entero y si hubiera podido me hubiera comido cuatro más.