Las recetas de legumbres se adaptan a todas las estaciones del año ya que se pueden preparar tanto en platos fríos como ensaladas, perfectas para el verano, como guisadas, una opción ideal para combatir las bajas temperaturas del invierno. Sea como sea que decidas hacerlas, seguro que están deliciosas. Echa un ojo a nuestras recetas de legumbres perfectas para todos los gustos con lentejas, garbanzos o alubias.
 

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Recetas con legumbres ᐅ Deliciosas y saludables | Recetas DIA
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Recetas con legumbres ᐅ Deliciosas y saludables | Recetas DIA

Potaje de alubias pintas

Las alubias pintas son muy parecidas a las rojas pero, una vez hechas, no quedan tan grandes ni tan encarnadas. Deben ponerse a remojo 12 horas antes. Prepárese la olla con el ajo, el chorizo, el jamón y un buen chorro de aceite, poniendo en ella las alubias con el agua fría. A media cocción, se añadirán los huevos y las patatas picadas muy menudas. Se añade la sal conveniente y, al servir, se echará por encima el chorizo y el jamón picados.

Todos los ingredientes posibles son de marca DIA.

Receta enviada por CarmenBarrero

Lentejas con butifarra, chistorra y refrito de hortalizas

En ensalada o en guiso, con verduras, con costillas, con chorizo o viudas… sean como sean, las lentejas son todo un lujo de legumbre con gran cantidad de hierro, proteínas, fibra, hidratos de carbono y vitaminas. En este caso… te proponemos un guiso tradicional, muy completo –pues también se acompaña de arroz- contundente –por la chistorra y la butifarra-… ¡ideal para los fríos días de invierno!

Paso 1:

Judías al estilo asturiano

Una fabada asturiana es un plato contundente pero delicioso. Sin embargo, no siempre tenemos a mano el compango necesario, la fabes o el tiempo que requiere su preparación. Si es así, prueba esta receta de judías al estilo asturiano igual de sabrosas pero que están listas en la mitad de tiempo. ¡Toma nota!

Paso 1:

Remoja las judías durante 12 horas en un bol o cacerola con abundante agua. Generalmente, la judías se ponen en agua la noche anterior al día en que se van a preparar.

Paso 2:

Lentejas caseras con chorizo

A mí me pueden decir que las lentejas estaban muy buenas en ensalada o guisadas de cualquier forma, que no me importa, por que como yo las prefiero es guisadas con chorizo. Me encantan las dos cosas, tanto las lentejas como el chorizo, por lo que juntas no podían nada más que encantarme. Si queréis hacer unas buenas lentejas caseras con chorizo, solo tenéis que seguir esta receta, y tendréis las mejores que por lo menos yo he probado.

Lentejas con muslos de pollo

Mi madre siempre me decía: “Hoy hay lentejas, si quieres las comes y si no te las meriendas”. Y vaya que si las merendé, y más de un día. No me gustaban nada y ahora me encantan, cuanto sufrimiento habría ahorrado a mi madre si las cosas fuesen como ahora. Incluso le he pedido una receta que hace ella de lentejas con muslos de pollo buenísimas, son las únicas que le gustan a mis hijos, he tenido un poquito de suerte.

Pollo con lentejas

Si me juntas el pollo con lentejas, me conquistas. Me encantan los dos por separado, pero más me gustan juntos. De hecho, un guiso de lentejas no me gusta de otra forma, solo las tomo en ensalada si no es así. Así que, esta receta me encanta.
Lo primero que debemos hacer es poner las lentejas a remojo el día anterior, así que tenemos que tener claro que las vamos a hacer el día siguiente.
Una vez vayamos a cocinar, cortamos el pollo en trozos y lo sazonamos a nuestro gusto, siempre pensando que añadir es fácil pero quitar no.

Ensalada de lentejas con salmón

¿Quién dijo que las legumbres sólo se pueden comer en guisos calientes? Gracias a esta deliciosa ensalada descubrirás otra forma de comer lentejas, divertida y fresquita. Una ensalada de lentejas que dará otra dimensión al término legumbres.

Paso 1:

Para esta receta puedes cocer tú mismo las lentejas, pero resultan muchísimo más cómodos los botes de lentejas cocidas. Es muy rápido y el resultado es perfecto. Eso sí, tendrás que colar las lentejas y lavarlas con un poco de agua, para quitar el sabor del agua que traen los botes.