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El helado de chocolate es el preferido de mi familia, pero a cada uno nos gusta de una forma. A unos de chocolate con leche y a otros de chocolate negro. Por eso la ventaja de esta receta es que puedes hacer el helado con el chocolate que más te apetezca. Ya verás lo fácil que es degustar un magnífico helado de chocolate.
Lo primero que vamos a hacer es trocear el chocolate, echarlo a un cazo junto con la leche y cocerlo hasta su completa disolución.

Para mí no hay mejor desayuno que uno que está compuesto por un buen café con leche y algo dulce con lo que remojar. Uno de esos dulces que más me gustan es este bizcochuelo granizado, receta que me pasó mi amiga Carmen. El bizcocho es suave y delicado, y resulta delicioso acompañado con los granos de chocolate. Receta que os terminareis aprendiendo de memoria ya que la haréis muy a menudo debido a lo bueno que está.
En un bol colocar los huevos y batir con el aceite, hasta integrar bien, agregar la esencia, la ralladura, el azúcar y seguir mezclando.

La verdad es que hacer este pudin sencillo de pan con manzanas y pasas de uva es de lo más sencillo y el resultado no puede ser mejor. Utilizando el pan de molde conseguimos una textura más suave que casa perfectamente con la de la compota de manzana. Un postre que a nadie dejará indiferente por lo bueno que está.
Lo primero que vamos a hacer es la compota de manzana. Yo lo que hago es que aso las manzanas, y cuando están hechas las saco su pulpa haciendo con ella un puré junto con unas cucharadas de coñac, azúcar, ralladura de limón y canela a gusto.

La verdad que disfrutar de estos bollos de manzana y pera solo te llevara unos minutos porque son muy fáciles de hacer y el resultado es un dulce delicioso. Prueba estos bollos en los que tan bien quedan mezclados los sabores de las frutas con los frutos secos. Perfectos a cualquier hora del día.

En verano lo que más nos apetece tomar son cócteles al borde de la piscina, emulando unas pasadas vacaciones en el Caribe. Pero como eso no es posible, nos tenemos que adaptar a las circunstancias. Y si nosotros lo hacemos, ¿por qué no nuestros cócteles? Aquí te traigo esta deliciosa receta de margarita mediterráneo, para traerte un poco de allí, y adaptarlo a lo de aquí. Delicioso y refrescante.

Este arroz conde es una versión del arroz con leche de toda la vida. Y si el uno estaba bueno, el otro aún más. Es sencillo y fácil pero de gran sabor, además del toque que le dan las pasa. Todo un acierto.
Empezamos por lavar el arroz para quitarle el exceso de almidón, y poner a hervirlo en la cazuela con la leche, la ralladura de limón y la rama de canela. Debes poner la cazuela a fuego bajo o medio.

Esta receta de tarta de queso y frutas es el resultado de sustituir el queso crema por quesitos, y he de deciros que me gusta mucho. Le da un toque diferente que queda espectacularmente bien con las frutas con mermeladas. Un postre fresco y lleno de color.
Comenzaremos por hacer la masa de la tarta. Para ello en un vaso alto de batidora, poner los huevos, los quesitos, el azúcar y la nata. Batir hasta que quede una masa fina. Poner la preparación en un bol grande.

Soy una apasionada de las magdalenas. Me encanta, no lo puedo evitar. Pero las que más me gustan son estas muffin de chocolate y café, cuya receta me dio una amiga. No hay semana que no las haga y nunca me canso de ellas. Está buenísima la mezcla del chocolate con el café. te animo a que las pruebes.
Empezamos mezclando en un cuenco los ingredientes secos, la harina, el cacao en polvo, el azúcar blanca y morena, el café, la levadura, la sal y el bicarbonato hasta que queden bien ligados.

Nunca había imaginado la buena combinación que hacían el plátano y el chocolate hasta que probé estas maravillosas magdalenas de plátano con chocolate. es una mezcla fascinante que en estas magdalenas se convierte en algo mágico.
Colocar los moldes de papel dentro de una placa para magdalenas. Fundir la mantequilla y dejar que entibie.
Mezclar la harina con la levadura, el bicarbonato y la canela. Batir los huevos con el azúcar, la mantequilla y el yogurt, hasta obtener una masa lisa.

He ido a muchos sitios y comido en muchas casas, y he de decir que como la fabada de mi abuela no hay ninguna, Yo creo que el truco reside en que ella además de los elementos convencionales que integran una fabada y que dan tan buen sabor, echaba un poquito de azafrán que le daban ese toque diferente en sus aromas y sabor. Prueba este plato y notarás la diferencia con el resto.