Receta de Pastel de patatas
Una forma de comer verduras o algún ingrediente que no os gusten es cocinarlos a "escondidas" en otro plato o con otros alimentos que disimulen su sabor. Este pastel de patatas es el claro ejemplo de un plato así. Era la técnica que utilizaba mi madre para conseguir que yo me comiera las verduras u otros alimentos que no me gustaban y que ahora es la técnica que utilizo yo. En primer lugar vamos a hervir las patatas peladas. Cuando estén cocidas y blanditas, vamos a cortarlas y a hacerlas puré.
Patatas al horno con hierbas aromáticas
Las patatas al horno con hierbas aromáticas son muy ricas de sabor, obviamente, y, aparte, muy sanas porque están hechas de una forma muy sencilla.
Se lavan las patatas y se ponen a cocer cubiertas de agua fría durante unos 20 minutos. Mientras las patatas se cuecen, cortamos la cebolla en rodajas.
Una vez cocidas las patatas, se escurren bien y se les quita la piel con cuidado. Se cortan al gusto, ya sea en rodajas o en gajos.
Tortilla de patatas y jamón york
Una tortilla de patatas y jamón york es algo bastante fácil de hacer y, sobre todo, muy cómodo si se deja echa la preparación y solo hay que cuajarla, que es lo que suelo hacer yo en mi casa.
Pelar las patatas y cortarlas en rodajas muy finitas. Partir la cebolla en gajos finos y reservarlos. Por último, poner en un cuenco los huevos batidos, una cucharada de agua, un pellizco de sal y otro de pimienta.
Ensalada de patata para el verano
A mí las ensaladas me vuelven loca, hasta tal punto que en la mayoría de los días en alguna de mis comidas está presente. En estas épocas de calor la que más suelo hacer es esta ensalada de patatas veraniega, porque además de estar muy rica es verdaderamente refrescante. El verdadero toque le da el tomillo.
Lo primero, porque es lo que más tarda, es cocer las patatas sin pelar pero bien limpias de tierra y otras suciedades en agua con un poco de sal hasta que estén tiernas al pincharlas con un tenedor.
Patatas fritas con salsa tártara
La guarnición mas internacional que suele acompañar a carnes, pescados, etc., suelen ser las patatas. Dentro de estas, hay muchas maneras de cocinarlas y servirlas junto a los platos. En casa, una de las formas más típicas de prepararlas son las patatas fritas con salsa tártara que estoy segura que todos hemos cocinado y probado y que nos encanta, al menos a mí. Para elaborarlas es muy sencillo y el resultado es buenísimo porque a todos gustan.
Precalentamos el horno a 180ºC. Freímos las patatas fritas con el bacón, cuando estén doraditas colocamos en un plato o fuente.
Ensalada con huevos y verduras
Esta receta de ensalada con huevos y verduras siempre queda bien para servirla cuando dudas de que a alguien le pueda gustar algo o no. Al ser un poco variada, tiene para todos los gustos.
Patatas salteadas
Estas patatas salteadas quedan buenísimas como guarnición de una carne o de un pescado. Es una buena idea, apúntatela y pruébala que no te va a decepcionar.
Hay que pelar las patatas con un pelapatatas o un cuchillo de hoja lisa, y darles un agua. Una vez listas, se cortan al gusto y se fríen en una sartén con aceite bien caliente y la sal y la pimienta al gusto. Además, se añade un poco de romero para que cojan el gusto y se dejan en el fuego hasta que estén crujientes.
Patatas rellenas con tres quesos
Si te gusta mucho la patata y te gusta hacerla de formas diferentes, prueba las patatas rellenas de tres quesos, te van a encantar.
Comienza hirviendo las patatas enteras, con la piel incluida, hasta que estén cocidas pero no muy blandas. Puedes hacerlo en el microondas o en una olla con agua. Ve pinchando con un tenedor para saber si están o no en su punto. Una vez estén listas, ahuécalas y colócalas en un bol para que se enfríen.
Pierna de cerdo
Esta pierna de cerdo es conveniente hacerla cuando se puede comer entre varios porque da para mucho y, además, porque merece la pena.
Se le hacen que hacer cortes en la pierna de cerdo lo más profundos que se pueda sin llegar a dañarla. En una fuente grande se coloca la pierna y se echa agua hasta cubrirla. Entonces, se saca la pierna y se añade la sal y el huevo. Se mete de nuevo la pierna y se deja un par de días en la nevera macerándose para que coja sabor.
Patatas rellenas con gambas, jamón serrano y queso
Un plato que suelo comer cuando llegan las fiestas de mi pueblo son esas ricas patatas asadas rellenas, ¡me encantan! Hace poco me entraron muchísimas ganas de comerme una de esas patatas pero como es de esperar no había feria pero me dispuse a hacerlas a mi manera y he de confesaos que estaban tan ricas que apunté esta rica receta de patatas rellenas de gambas, jamón serrano y queso que me salieron. ¡Riquísimas!