Pisto con migas y huevo
Este pisto de verduras y huevo, es uno de esos platos tan reconfortantes como ricos y deliciosos. Una comida saludable, fácil y que gusta a todo el mundo. Resulta además de lo más original... ya que con el pisto se suele comer mucho pan, y esta receta lo incorpora, y da una vuelta de tuerca a la forma de incorporar el huevo... en lugar de frito, optamos por una tortilla francesa cuajada solo por uno de sus lados, para que esté muy jugosa. Es un plato clásico, pero al mismo tiempo original.
Coliflor con salsa mornay - vídeo receta
La Mornay es una salsa clásica elaborada apartir de una bechamel clásica a la que se le añaden yemas y queso. Se trata de una salsa ideal para para huevos, pastas, pescados, mariscos... pero sobre todo para hortalizas. Así, esta coliflor con salsa Mornay se converte en una absoluta delicia gourmet... capaz de convencer hasta aquellos a los que más les cuesta comer verduras: los niños. ¡Pruébala y verás!
Tumbet mallorquín
Como guarnición de pescado, carne o huevos o como plato principal nutritivo y vegano, el tumbet mallorquín es una opción deliciosa y saludable para uno de esos días en los que ya empieza a apretar un poquito el calor. Hay preparaciones elaboradas en las que se colocan los ingredientes por capas como si fuera una lasaña e incluso se prepara un lecho de patatas como base y otras, como ésta, para un día en el que no te sobre tiempo.
Berenjena rellena con quinoa
Las berenjenas rellenas son una de las opciones más apetitosas para consumir hortalizas pero lo cierto es que las recetas suelen incluir carne roja y grandes cantidades de queso, lo que no las convierte en una opción ligera. Este plato de berenjena rellena con quinoa prescinde de ingredientes de origen animal y resulta una cena saludable, sencilla y muy, muy sabrosa.
Paso 1:
Champiñones gratinados
Si buscas un plato sabroso, reconfortante y vegetariano, ya lo has encontrado: estos champiñones gratinados son una auténtica gozada para los sentidos. Sirven tanto para comerlos solos como para utilizarlos como guarnición de otra cosa, pero cuidado… ¡hartan bastante!
Paso 1:
Coles de Bruselas, zanahoria y brócoli al horno
Las verduras correctamente cocinadas y sazonadas son un manjar que cabe en cualquier mesa por su variedad de sabores y económico precio. Este plato de coles de Bruselas, zanahoria y brócoli al horno es beneficioso para tu salud por su gran cantidad de agua, vitaminas y minerales y bajo porcentaje de grasas y calorías; pero es que, además, está tan bueno que querrás vaciar el plato dos veces. El amargor y la dureza característicos de las coles de Bruselas y el brócoli se pierden con el asado y el picante de la guindilla añade un toque extra de interés.
Pasta con alcachofas
¡Otra receta a la vez saludable y sabrosa! Este plato de pasta con alcachofas te aportará fibra, minerales, energía y muchas ganas de repetirlo. Su mayor complicación es pelar las alcachofas, y si sigues nuestra sugerencia… ¡te librarás hasta de eso!
Paso 1:
Prepara un recipiente con agua y zumo de limón recién exprimido.
Paso 2:
Coliflor gratinada
Esta coliflor gratinada, cremosa y crujiente, es una de las formas más apetitosas de consumir esta inflorescencia. El aporte calórico de la bechamel se contrarresta con la gran cantidad de agua, fibra y antioxidantes que aporta la coliflor, de modo que resulta un plato que llena el estómago pero sin resultar pesado.
Paso 1:
Tomates rellenos
En cuestión de versatilidad, el tomate no tiene mucha competencia. Fresco, asado, en gazpacho, en salsa… ¿qué no hacemos con esta joya roja venida de América? Una de las preparaciones más completas consiste en rellenarlo de lo que queramos, lo que lo convierte en un excelente entrante. Fríos están deliciosos, pero estos tomates rellenos de queso y pan rallado tienen una suculencia difícil de alcanzar. Simplemente imagina clavar el cuchillo y el tenedor y ver y oler todo ese queso fundido derramándose…
Fabes vegetarianas
Un plato completo y de lo más suculento. Estas fabes vegetarianas son toda una delicia apta para veganos... y para todos aquellos que, sencillamente, disfrutan con un plato de cuchara reconfortante. ¡No echarás de menos el compango!
Paso 1:
La víspera, pon las fabes a remojo con abundante agua.
Paso 2: