Quiche de brécol y salmón
Esta quiche de brécol y salmón vale muchísimo la pena hacerla a pesar del tiempo que conlleva, es algo exquisito. He probado muchas quiche, ya que estuve viviendo en Francia, y ninguna como ésta, que la probé allí también.
Se prepara un molde mediano y se unta de mantequilla y harina. Se extiende la masa quebrada en la encimera enharinada y se extiende con un rodillo. Cuando esté lista, se extiende en el molde engrasado y enharinado y se pincha un poco con el tenedor para que no suba en el horno. Se precalienta el horno a 180 º y se hornea unos 10 minutos.
Carpaccio de salmón
Yo comía muchísimo carpaccio de salmón cuando vivía en el norte del país porque me encantaba y, además, la calidad del pescado era espectacular, nada se le compara salvo el salmón noruego, que es riquísimo.
En primer lugar hay que quitarle la piel al salmón y hacer con él láminas muy finas, casi transparentes, como las del carpaccio tradicional. Estas láminas de salmón se colocan en una fuente o en un plato de forma ordenada, y se reservan.
Empanada de atún y pisto
He de decir que esta empanada de atún y pisto me salía fatal al inicio, pero la cosa ha ido mejorando con el tiempo. Ahora que ya la controlo más o menos bien, creo que es un buen momento para escribir la receta aquí.
Langostinos al cava con salsa verde
Esta receta de langostinos al cava con salsa verde suena a demasiado trabajo, pero no es cierto. Es un plato ideal para poner como entrante en una comida, ya que no llena demasiado y es bastante práctico tanto de comer como de hacer.
En primer lugar, cortamos las barbas de los langostinos, que pueden ser congelados o frescos, dependiendo del presupuesto que quieras gastar, ya que salen muy bien
Paella de gambón y verdura
La paella de gambón y verdura es muy típica en mi tierra y estoy muy orgullosa de ella.
Limpiar las judías y cortarlas en trocitos, al igual que los dos trozos alargados de pimiento rojo. Las habas se dejan preparadas en un bol y se pone un cazo con agua de sobra para tenerla caliente y reservada.
Se coloca una paella en el fuego con aceite de oliva y, una vez caliente, se ponen los gambones y el pimiento rojo en ella junto con la sal al gusto. Se le da unas vueltas a todo hasta que se doren, y se reservan aparte.
Pimientos rellenos de pescado
Lo pimientos rellenos de pescado están riquísimos y son muy saludables para comer bien.
Por un lado, preparar una bechamel con la mantequilla, la harina, leche y sal, y remover bien hasta que coja la textura deseada.
Por otro lado, cocer el cabracho y la merluza en una cacerola con la sal, y, cuando estén listos, escurrirlos y dejarlos enfriar.
Alubias pintas con bacalao
Las alubias pintas con bacalao son de lo más típico en invierno, cosa que me parece totalmente lógica, al menos en mi pueblo. La verdad que dejo mi receta para la próxima temporada porque ya llega el veranito.
Ponemos en el fuego una cacerola grande con el aceite y, cuando esté caliente, freímos en ella los ajos y la cebolleta, ambos pelados y picados. Cuando la cebolleta esté transparente, añadimos el bacalao y lo rehogamos un par de minutos antes de echar el tomate rallado.
Pimientos del piquillo rellenos de ensaladilla con gulas
El plato estrella de mi madre son los pimientos del piquillo rellenos de ensaladilla con gulas, y ella lo sabe. Por lo que cada vez que quiere sorprender a alguien o celebramos un acontecimiento especial en casa los prepara. Es una receta sencilla, pero os aviso que absolutamente deliciosa. Prepáralos y te aseguro que deleitara hasta los paladares más exigentes.
Lubina rellena de verduras al horno
Esta lubina rellena de verduras al horno es una auténtica delicia que no se puede hacer todos los días porque no es de lo más barato, pero vale la pena.
Hay que abrir la lubina por la mitad, sazonarla con la sal y la pimienta, y untarla con el aceite de oliva.
Brocheta de bonito a la parrilla
Esta brocheta de bonito a la parrilla tiene un sabor fuera de lo normal, te lo puedo asegurar, y, además, es buenísima en un montón de propiedades. Si te gusta este tipo de pescados, te recomiendo que pruebes y me digas a ver qué te parece.
Limpiar el bonito, a no ser que no te lo haya hecho el pescadero, y cortarlo en dados al gusto, cómodos para comer directamente con la boca.