Fresas con chocolate especiado

Las fresas con chocolate especiado son el postre ideal para una cena con amigos. La verdad que no llenan mucho y es una manera de terminar con algo fresquito y suave para el estómago.
Lavar las fresas con abundante agua y cortarles el rabito verde reservándolas en un bol.
Poner un cazo en el fue al baño maría y derretir en él el chocolate, la mantequilla y la leche. Cuando todo esté fundido y perfectamente integrado, se añade la guindilla y la pimienta de forma que el chocolate quede especiado.

Sambayón de naranja

Esta receta para preparar el sambayón de naranja es bastante sencilla y de verdad espero que os sirva en más de una ocasión. Yo lo utilizo muy a menudo, por eso creo que es una buena receta para escribir en un blog tan práctico como lo es éste.
Se ponen las yemas de huevo en un bol y se baten bien agregando el azúcar hasta conseguir una mezcla más bien espumosa. Se añade la cascara rallada de las naranjas y se integra bien con el resto de ingredientes.

Ensalada de calabacín y tomate

Si te gustan ambas verduras, esta ensalada de calabacín y tomate te va a sorprender bastante creo yo. Es una mezcla bastante buena porque ninguno de los sabores sobresale por encima del otro y, además, queda una presentación muy colorida.
Lavar y cortar el calabacín en rodajas. Salarlo y espolvorearlo con el ajo en polvo por ambos lados. En una sartén con una pizca de aceite bien caliente, echar las rodajas de calabacín salpimentadas, dejándolas dorarse por los dos lados.

Manzanas caramelizadas

Cada último día de la feria y era pequeña, la tristeza porque la feria ya se acaba era muy grande pero también está contenta porque ese día mi abuelo me compraba mi manzana de caramelo, ¡me encantaban! Cada día que iba a la feria y pasaba por los puestos, me relamía al verlas todas colocada, tan brillantes y llenas de caramelo, mmmm. Con el paso de los años, esa tradición se fue perdiendo, es lo que tiene crecer, pero ahora que tengo hijos, la hemos vuelto a recuperar solo que ellos son más impacientes y no pueden esperar un año completo para comerse una.

Pizzas de pan caseras

Estas pizzas de pan caseras son una especie de paninis muy sabrosos que te sacan de más de un apuro en un momento dado. Todos los ingredientes que llevan los solemos tener en casa, por lo que es fácil hacerlos a prisa y corriendo en cualquier momento.

Angulas de pobre

Las angulas de pobre es la versión económica de las angulas al ajillo, plato reservado para las mesas más exclusivas. Es muy sencillo hacerlo y sabe riquísimo. Puede que no esté hecho este plato con las angulas auténticas, ya que es un plato exquisito y muy caro, pero esta versión hecha con gulas, un sucedáneo, si está bien ejecutada, sabe realmente deliciosa y no tiene nada que envidiar al original.

Gyoza

Desde que comí por primera vez gyoza en un restaurante japonés me quede enamorada de este plato. Me encanta el contraste de la base crujiente frita con el resto de la masa blanda hecha a l vapor, por no decir nada del delicioso relleno interior de carne. Preséntalas como aperitivo y todos tus invitados quedaran enormemente sorprendidos.

Ensalada de pasta con brócoli

Esta ensalada de pasta con brócoli está pensada para que sea plato único acompañada de un buen entrante o un buen postre, lo que más nos guste. Yo, que soy de salado, siempre prefiero algo antes, como unas anchoas o unos mejillones, que no llenan mucho para poder comer la ensalada sin problemas.
En una olla con agua hirviendo y salada al gusto, cocer la pasta que se prefiera para una ensalada. Cuando alcance el punto que más guste, colarla y escurrirla bien de agua, y dejarla enfriar a temperatura ambiente.

Ensalada de espinacas tiernas con manzana, albaricoques y semillas

Las ensaladas es un plato que no puede faltar como entrante en ninguna comida o cena. Son saludables, sencillas de preparar y muy saciantes. Además, permiten infinidad de ingredientes. Yo os voy a contar como preparar una rica, saludable y sencillaensalada de espinacas tiernas con manzana, albaricoques y semillas. ¡Deliciosa!
En primer lugar, en una fuente honda vamos a volcar la bolsa de espinacas formando una especie de montañita.
Después, vamos a lavar y a pelar la manzana y rallarla gruesa encima de las espinacas.