Ensalada sencilla de aguacate y salmón ahumado

El aguacate se ha convertido en el niño bonito de los frutos y eso es una buena noticia porque, aunque parezca que es simplemente por moda, los beneficios de este vegetal verde y cremoso están ampliamente contrastados. Fuente de potasio y de grasas monoinsaturadas, el aguacate (o palta, como se le llama en algunos países del sur de América) combina excelentemente con alimentos salados y de sabor penetrante, así que esta ensalada sencilla de aguacate y salmón ahumado hará las delicias de todos.

Paso 1:

Lava y seca cuidadosamente las hojas de lechuga. Si tienes que emplear una buena cantidad, es interesante contemplar la posibilidad de hacerse con un escurridor de verduras: gracias a la fuerza centrífuga que se le imprime al cestillo con la manivela, las verduras quedan secas en unos pocos segundos.

Paso 2:

Pela la cebolla y córtala por la mitad. Apoyando la parte plana sobre la tabla de cocina, córtala en juliana fina (es decir, en tiritas) para que al mezclarla con la ensalada le imprima sabor y una textura crujiente pero sin el protagonismo de presentarse en trozos grandes que puedan resultar excesivamente irritantes al paladar.

Paso 3:

Saca el salmón de su envase y pártelo en tiras o cuadraditos, lo que más agradable y cómodo te resulte de comer en una ensalada. Si te sobre salmón, mételo en un recipiente de cristal con tapa hermética y cúbrelo con una capa de aceite para conservarlo.

Paso 4:

Comprueba el grado de madurez del aguacate palpando su consistencia (debe ceder a la presión pero sólo muy levemente) y observando el color que presenta la parte de debajo del tallo al retirarlo: si es amarillo brillante, está en su punto óptimo. Procede a abrirlo hendiéndolo con un cuchillo hasta tocar el hueso y deslizando ese cuchillo alrededor del mismo hasta obtener las dos mitades. Sepáralas con las manos. Una de las dos conservará el hueso. Con un golpe seco, clava la hoja del cuchillo en la semilla del aguacate, gíralo ligeramente y sácalo sin necesidad de manipular la carne que lo rodea.

Paso 5:

Saca la carne del aguacate con ayuda de una cuchara o cucharilla, desecha las partes demasiado duras o de color marrón grisáceo que pudiera tener y córtala en rodajitas. 

Paso 6:

Parte por la mitad las rebanadas de pan y tuéstalas ligeramente para que tengan un toque crujiente.

Paso 7:

Mezcla la lechuga, la cebolla, el salmón y el aguacate. Alíñalos al gusto con aceite de oliva virgen extra, vinagre, sal y pimienta.

Presentación:

Sirve tu ensalada sencilla de aguacate y salmón ahumado recién aliñada en una ensaladera vistosa. Acompáñala de tostas de pan y disfruta de este manjar rico y saludable.

Sugerencia:

La sal rosa del Himalaya de la línea Delicious de DIA aliñará tu ensalada sencilla de aguacate y salmón ahumado no sólo con sabor sino con originalidad y belleza.

Alternativa:

Prueba esta ensalada con cualquier pescado ahumado. ¿Tienes a mano bacalao ahumado? ¿Trucha ahumada? Lánzate a experimentar.

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