Ensalada de fresas
Una buena vinagreta realzará el sabor de esta deliciosa y saludable ensalada de fresas. Es, sin duda, una buena forma de variar los sabores y completar tus ensaladas del día a día dándoles un toque especial. Para hacer una buena vinagreta debes seguir algunos pasos esenciales: utiliza siempre la proporción de 3 a 1 es decir, 3 cucharadas de aceite para 1 de vinagre u otro elemento ácido como puede ser el limón. Disuelve la sal en el elemento ácido ya que se disuelve mejor que en el aceite. Seguro que darás una nueva vida a tus ensaladas.
Ensalada de huevos rellenos de hummus
El hummus es una receta antigua cuyo origen se sitúa en el antiguo Egipto. Muy común en países árabes y del Oriente Medio es uno de los platos principales y más conocidos de la cocina libanesa. Es un plato muy nutritivo y de elaboración rápida y sencilla. En esta receta de ensalada de huevos rellenos de hummus vamos a combinar la legumbre con otro alimento muy nutritivo y rico en proteínas como es el huevo. ¡Vamos allá!
Ensaladilla rusa
No, no se trata de una ensalada llegada de la antigua Unión Soviética … porque la ensaladilla rusa, es uno de los platos más populares del recetario español… aunque su origen sí que nos traslada a Moscú, ya que fue en 1860 cuando Lucien Olivier, chef de uno de los restaurantes moscovitas más conocidos, el Hermitage, creó esta ensalada.
Bisque de Langostinos
1 Puerro
1 Cebolla grande
4 Zanahorias
20 Langostinos
1 Litro de caldo de pollo
1 Guindilla
4 Ajos
4 Tostadas de pan
Un poco de Perejil
1 taza de coñac
Sal, Pimentón rojo y Aceite de oliva.
Paso 1: Cortamos en trozos pequeños la cebolla, el puerro, las zanahorias y lo ponemos todo en una cazuela grande con un poco de aceite a sofreir con el fuego muy lento.
Spanakopita o pastel griego de espinacas y queso
Este plato es el pastel salado más famoso de Grecia: Spanakopita o pastel griego de espinacas y queso. Por supuesto, en la receta original griega emplean queso feta... el queso más emblemático heleno. Sin embargo, si no lo encuentras, o si prefieres uno más económico, lo puedes sustituir por un queso fresco con sabor, o incluso por queso semicurado rallado. En Grecia se toma habitualmente como aperitivo… ¡y a veces como desayuno!
Raviolis rellenos de espinacas y requesón al parmesano
Prepara tus propios raviolis, y ya nunca querrás comer otros. La receta es entretenida, pero … ¡ es tan divertido meterse en harina!
Paso 1:
Haz un volcán con la harina tamizada y rellénalo con los huevos batidos y un poco de sal. Ve incorporando la harina hacia dentro y trabaja con las manos para ir incorporando toda la harina y hacer una masa homogénea. En caso de que quedara muy seca puedes añadir unas cucharadas de agua hasta lograr la consistencia adecuada.
Ensaladilla rusa original
La ensaladilla rusa original, o la que yo considero original, es esta receta. De toda la vida la he comido así y mi abuela siempre me decía que ella hacía la original, así que ya se ha quedado bautizada así.
Ponemos una olla rápida con agua y ponemos a cocer las patatas, bien lavadas, las zanahorias sin puntas y los huevos, lavados también, durante 10 minutos desde que empieza a hervir el agua.
Por otro lado, picamos la cebolleta y los pepinillo en trozos muy pequeñitos, y los reservamos aparte.
Arroz oriental con huevo frito
Por falta de tiempo no me queda otro remedio que recurrir de forma bastante habitual a los platos precocinados que venden en los supermercados, pero eso sí, adecuándolos siempre a mis gustos y completando su sabor con otros ingredientes, ya que en mi opinión suelen ser bastante sosos. De esta forma consigo elevar un simple arroz congelado a una comida estupenda como es el caso de este arroz oriental con huevo frito.
Revuelto de tomate y pimiento asado
El revuelto de tomate y pimiento asado es una receta que va muy bien como guarnición de un buen filete, pero que también se puede tomar sola.
Asar los pimientos colocándolos en la bandeja del horno forrada con papel de aluminio. Darles la vuelta cuando la piel ennegrezca y, una vez estén listos, dejarlos enfriarse. Pelarlos quitándoles las semillas y los nervios, y cortarlos en tiras finas.