Empanadas de cordero

Hacer empanadas de cordero es fácil pero lleva su tiempo, así que te recomiendo que, si te planteas hacerlas, tengas un poco de paciencia para que todo te salga bien sabroso.
Deshacer la levadura en un poco de agua tibia y reservarla. En un bol, colocar la harina, la sal y la grasa, y, con los dedos, desintegrar la grasa en la harina. Añadir la y el resto de agua bien caliente. Mezclar los ingredientes hasta obtener una masa que quede lisa y suave, pero consistente y no pegajosa. Dejarla reposar durante media hora tapada con un paño húmedo para que levite.

Espaguetis con crema de marisco

Me encanta la pasta, es un plato que suelo comer incluso para las ocasiones especiales, porque pienso que le gusta a todo el mundo. EL pasado San Valentín le prepare a mi chico estos deliciosos espaguetis con crema de marisco, y la verdad es que le encantaron a él tanto como a mí. Hice una buena cantidad, y junto a un rico postre de chocolate, fueron toda la cena. Es un plato fantástico y fácil, con el que quedaras estupendamente, se lo ofrezcas a quien se lo ofrezcas.

Arroz al horno con garbanzos y setas

Una receta muy fácil, sencilla, nutritiva y, lo que es mejor, rica y sorprendente. Desde luego, se trata de un arroz diferente. Una idea original ideal para variar nuestro recetario y sorprender a los comensales.

Paso 1:

Pon a remojo las pasas durante tres horas para que se hidraten. Reserva.

Paso 2:

En un sartén con un chorrito de aceite, rehoga los ajos cortados en láminas con las pasas durante 2 o 3 minutos cuidando de que no se quemen ni se doren demasiado. Incorpora el arroz y sofríelo todo junto 2 minutos.

Arroz caldoso con marisco

Todo un lujo de arroz… una receta para apuntarse un tanto en esas fechas en las que hay algo que celebrar o, simplemente, uno quiere darse un homenaje. Utiliza un arroz bomba, esa variedad de grano redondo tan apreciada en levante. Acompáñalo con un buen vino blanco… y apúntate un tanto con tus invitados.

Paso 1:

Introduce las ñoras en agua tibia durante 20 minutos, para que se ablanden. Pica la cebolla muy finita y pela los langostinos, reservándote las cabezas y las cáscaras.

Paso 2:

Risotto de frutos rojos con queso azul

Una receta de risotto tan sorprendente como sencilla… llena de sabor y de constrastes que, sin duda, no te dejará indiferente. El dulzor de los frutos rojos se ve contrarrestado por el carácter del queso de azul y, ambos, envueltos en la cremosidad de un buen risotto. ¡Sorprendente!

Paso 1:

Coloca los frutos rojos en un bol con el vino blanco para hidratarlos, si has optado por frutos rojos deshidratados, o para descongelarlos, en su caso.

Paso 2:

Solomillo de cerdo guisado con frutos secos y hortalizas

En salsa, envuelto en hojaldre o en bacón, a la plancha, a la pimienta, a la naranja, en brochetas o a la sal… lo cierto es que el solomillo de cerdo es delicioso sea como sea. Su carne es tierna y versátil, admite múltiples preparaciones y es mucho más económica que la misma pieza de ternera. En esta receta fácil y riquísima, el solomillo se presenta en un reconfortante guiso.

Paso 1:

Pica la cebolla finita. Pela la zanahoria y pártela en rodajas. El puerro, límpialo de sus hojas externas, raíces y partes verdes más duras, y pícalo también finito.

Conejo estofado con patatitas

Un guiso con sabores de toda la vida, pero muy suave, saludable y ligero. Y es que la carne del conejo tiene grandes propiedades nutricionales, pocas calorías… y lo que es mejor, un precio estupendo. Todo una gozada para un plato suculento.

Paso 1:

Limpia bien el conejo de posibles impurezas, como restos de pelillos y del exceso de su grasa. Y si no lo has comprado troceado, hazlo con la ayuda de un cuchillo grande o machete, con cuidado de no astillar los huesos.

Paso 2:

Guiso de mejillones, gambas y calamar

Un guiso la mar de rico, gustoso y completo… y moderno. Olvídate de asociar la palabra guiso a plato contundente, calórico y tradicional… y a éste es difícil resistirse.

Paso 1:

Pica finamente la cebolla. Por otro lado, limpia el calamar separando la cabeza del cuerpo. Limpia bien por dentro el tubo sacando todo su contenido, retira la membrana que recubre su cuerpo y limpia bien los tentáculos rechazando la parte de los ojos, la bolsa de tinta y el pico. El cuerpo pártelo en aros, y los tentáculos en dos o tres trozos.

Paso 2: