Brécol guisado con chorizo y beicon
Las verduras en un alimento que por lo general suele resultar un poco insípido, por lo que se suele aderezar para así proporcionarla un sabor más delicioso. Un ejemplo de ello es este plato de brécol guisado con chorizo y beicon.
Huevos rellenos de tapenade
Los huevos rellenos de tapenade son típicos del sur de Francia: es un aperitivo que tienes que llevar a tu mesa, con un poco de pan recién tostado. El tapenade es una especia de paté de aceitunas, al que le puedes agregar también alcaparras, o incluso hacer variantes, por ejemplo, con pimientos. En cualquier caso esta es una buena opción para cenar o un plato para compartir.
Paso 1:
Ñoquis caseros
Hacer los ñoquis caseros es divertido y te sientes muy realizado cuando terminas. Se pueden servir de mil formas que siempre quedan buenos y muy contundentes.
Se hierven las patatas, previamente peladas y cortadas en rodajas, en una cacerola con agua abundante y sal al gusto. Una vez listas, se cuelan y se colocan en un bol para convertirlas en puré. Una vez listas, se mezclan con la rodaja de mantequilla.
Lasaña de pastas varias
Espero que disfrutéis muchísimo de esta lasaña de pastas varias, que es bastante consistente y alimenta considerablemente por el hecho de que lleva una mezcla de ingredientes perfecta para hacer una comida completa.
Preparamos la salsa de la lasaña mezclando el sobre de sopa de cebolla con el sobre de la crema de champiñones junto a medio litro de agua en una cacerola. Además, echamos un poco de sal al gusto y los dos sobres de kétchup. Remover bien la mezcla y, cuando esté a punto de ebullición, retirarla del fuego y añadirle los champiñones laminados.
Croque Monsieur
Cuando pruebes este Croque Monsieur, seguro que pondrás a este clásico bocata francés en tu vida…¡porque los sándwiches también puedes ser gourmet! Y éste es un buen ejemplo…un bocado similar al típico sándwich mixto, pero algo más elaborado y sabroso, porque la bechamel le aporta un toque diferenciador y único.
Paso 1:
Comienza con la elaboración de la salsa bechamel, para lo que tendrás que poner la leche con la sal, la pimienta y la nuez moscada a hervir en un cazo no demasiado pequeño.
Paso 2:
Salsa de tomate
Dejo escrito cómo hacer salsa de tomate porque considero que es una de las cosas más esenciales en la cocina, puesto que se utiliza muchísimo. Si tienes hijos, en particular, la salsa de tomate es básica, a casi todos los niños les gusta.
Coca de sardinas
Si te encanta la pizza pero buscas una opción más completa, sana y sabrosa, prueba esta coca de sardinas… no dejarás indiferente a quien la pruebe. El sabor del tomate, el pescado, las aceitunas… la convierten en un entrante delicioso.
Paso 1:
Disuelve la levadura en agua tibia, no caliente, junto con la sal fina y ve integrando todos los ingredientes. En un bol amplio, pon la harina tamizada, es decir, pasada por un colador de trama fina o tamiz. Vuelca en el centro la mezcla de agua y levadura, y un poco de aceite.
Caldereta de cordero casera
Todos los veranos vamos al pueblo de un tío mío, que se encuentra en la alta Rioja Alta, y el plato estrella que nos prepara esos días es esta caldereta de cordero casera. Hace una cantidad enorme de ella, porque sabe que a todos nos gusta tanto que no paramos de repetir, incluso a pesar de saber que luego nos va a ser imposible levantarnos de la mesa.
Canelones de pollo y paté a las finas hierbas
Los canelones de pollo y paté a las finas hierbas no son muy ligeros pero están muy buenos. Si nunca los has probado y te apetece salirte de lo tradicional, te los recomiendo sin duda.
Cocemos los canelones en una cacerola con agua, un poquito de aceite y un poquito de sal al gusto. Cuando estén al dente, los sacamos uno por uno, con ayuda de una espumadera, a un papel absorbente.
Crema dulce de boniato
Esta crema de dulce de boniato se puede hacer con edulcorante o con azúcar, dependiendo de lo light que queramos que sea, y queda igual de rica. Yo la hago de las dos forma dependiendo de las personas que la vayan a tomar, y a veces no noto mucha diferencia.
Lavar y pelar el boniato sobre una tabla de madera de cocina, y ponerlo en un cazo con agua al fuego. Dejarlo cocer a fuego medio hasta que esté tierno y, una vez listo, dejarlo enfriarse.