Panna cotta de vainilla
La repostería italiana irrumpe de nuevo en nuestras cocinas… en este caso con este postre lácteo delicioso y sencillo de preparar. Además, la panna cota es un postre muy versátil que admite múltiples variaciones y sabores. ¡Descúbrelo!
Paso 1:
Abre longitudinalmente la vaina de vainilla y saca la pulpa que tiene en el interior. Reserva ambas cosas, la pulpa y la vaina abierta.
Paso 2:
Rollitos de lomo con ciruelas
La carne de cerdo combina a la perfección con sabores dulces como el de las ciruelas pasas. Una receta sencilla y rápida que además, enloquecerá a los niños.
Paso 1:
Extiende los filetes en una tabla y ponles sal. Reparte las almendras laminadas por encima.
Paso 2:
Aplasta las ciruelas y pon una encima de cada filete bien repartidas. Coloca después una loncha de queso.
Paso 3:
Mini plumcakes sin gluten
Desde que tengo un hijo celiaco me he ido interesando cada vez más ese "mundo". Antes, no miraba para nada el tipo de harinas ni alimentación pero ahora, sobre todo al principio, miraba todo con lupa y me preocupaba muchísimo por todo tipo de alimentos que mi hijo se podría perder. Ahora, por suerte, disponemos de muchos alimentos e incluso establecimientos especializados y con productos para personas celiacas y es de agradecer.
Pisto manchego
Uno de los platos de verduras más tradicionales de la cocina española. Un plato humilde que preparaban los campesinos de La Mancha con los productos de la huerta y que hoy se toma solo, con huevos fritos, o acompañando carnes y pastas.
Paso 1:
Lava las verduras. Pela y pica la cebolla en juliana. Pela y pica menudo el ajo. A su vez, corta en dados el pimiento, el calabacín y el tomate.
Paso 2:
Arroz integral con setas y bacón
Pura fibra. Esta receta de arroz integral supone una verdadera inyección de fibra y de vitaminas. Si quieres guardar la línea, no lo dudes, ¡a cocinar!
Paso 1:
Pela y pica en juliana la cebolla. Los ajos, pícalos finitos. Al puerro, quítale las hojas exteriores y corta las partes verdes más duras y pícalo en juliana. Corta en trocitos el bacón y, por último, si las setas están enteras o son muy grandes, trocéalas en cubos de tamaño medio, ni demasiado pequeño ni demasiado grande.
Paso 2:
Panga en escabeche
La tradición del escabeche se acerca cada vez más a nuevos productos, como en esta receta de escabeche de panga. Una receta muy sencilla ideal para cocinar el fin de semana y comer a lo largo de la semana. ¿Estás muy ocupado?... ¡pues ya no tienes excusa!
Paso 1:
Pela y corta la cebolla en juliana. Pela también los ajos la zanahoria y parte los ajos a la mitad y la zanahoria en láminas de unos 2 milímetros de espesor.
Filete de atún confitado con alubias y vinagreta de balsámico
El atún es, sin duda alguna, el rey de los mares. En este plato se alía con las alubias: dos ingredientes perfectos para una receta fácil y diferente.
Paso 1:
Descongela los filetes de atún -si has optado por el pescado congelado, que da muy buen resultado- y ponles sal y pimienta. Pica en finas láminas el ajo.
Paso 2:
Crema de zanahoria con jengibre
Una crema de verduras o un puré, también puede ser un plato exótico y delicioso. El jengibre aportará a esta sencilla receta un sabor oriental que te encantará.
Paso 1:
Pela y pica la cebolla y las zanahorias en dados pequeños. Pela también el trocito de jengibre y pícalo muy finito. Pon todos estos ingredientes en un bol apto para el microondas, añade un poco de sal y de aceite de oliva. Mézclalo todo bien y tapa con plástico film.
Paso 2:
Crema de guisantes a la menta con bacalao y jamón
El bacalao es un pescado delicioso que, en esta receta, se alía con los guisantes y el jamón para crear un plato delicado que será, seguro, un éxito en tu mesa.
Paso 1:
Acerca un cazo con agua al fuego y cuando rompa a hervir incorpora los guisantes y un poco de sal hasta que se pongan blanditos, lo que llevará 5 minutos.
Chipirones rellenos de cebolla caramelizada y chorizo
Chipirones rellenos de chorizo… ¿por qué no? Las combinaciones sorprendentes y arriesgadas son, en ocasiones, las que mejor funcionan. Y esta sencilla receta de chipirones rellenos es el mejor ejemplo.
Paso 1:
Limpia, en primer lugar, los chipirones. Para ello, separa en dos partes los chipirones, es decir, la cabeza del cuerpo. Lávalos bajo el chorro de agua desechando la cabeza y limpiando el interior del cuerpo. Al final, debe quedar el cuerpo y los tentáculos. Pica los tentáculos en dados pequeños.
Paso 2: