Empanadillas de sardinillas y verduras

Las empanadillas son un plato de toda la vida que no necesita presentación. Eso sí, cuando son caseras, se convierten en una verdadera delicia. Además, te permitirá hacer mil variaciones con el relleno… en este caso, al añadir verduritas y sustituir el tradicional atún por sardinillas, el resultado es sorprendente.

Paso 1:

Lava el calabacín y córtalo –sin pelar- en daditos. Pela y pica el ajo y la cebolla.

Paso 2:

Pollo frito al estilo americano

Ya sabemos que no se debe abusar de las frituras, pero… ¿quién puede resistirse de vez en cuando a un pollo frito como este?  Tan jugoso y sabroso que, antes de que te hayas dado cuenta, habrá volado.

Paso 1:

Si no has comprado el pollo ya en trozos, córtalo en 8: 2 muslos, 2 sobremuslos, 2 trozos de pechuga con alón y otros 2 sin él.

Paso 2:

Sandwich de salmón ahumado con garbanzos y 'ventana'

Una solución estupenda para cenar. Rápida, sencilla y suculenta. Porque preparar un sándwich puede ir mucho más allá del jamón y queso.

Paso 1:

Tuesta las rebanadas de pan y corta un círculo en 4 de ellas con un vasito pequeño, pero reserva el interior del círculo.

Paso 2:

Tritura los garbanzos con un poco del líquido de cocción (o del agua del bote), con una pizca de sal y un chorro de aceite. Debe quedar una textura como si fuera un paté.

Paso 3:

Ajoblanco

Esta sopa fría tan típica de la gastronomía andaluza, de origen humilde, es hoy una verdadera delicia. Un plato muy fino y delicado y, sobre todo, muy sencillo de preparar.

Paso 1:

Si las almendras están sin pelar, lo mejor es escaldarlas en agua para que la piel se separe mejor. Escaldar no es más que una cocción muy rápida. Pon un cazo con agua a calentar y cuando rompa a hervir añade las almendras. Sácalas en apenas 10 segundos y échalas a un bol de agua fría. Ya puedes pelarlas sin problemas.

Paso 2:

Ensalada verde con surimi, pera y vinagreta de mostaza

Los contrastes entre el dulce, el salado y el agrio son el  verdadero secreto de esta ensalada. Una receta rápida, ligera y sencilla, ¿qué más se puede pedir?

Paso 1:

Abre la bolsa de lechugas variadas y córtala un poco con un cuchillo si los trozos fueran demasiado grandes. Las lechugas que vienen empaquetadas ya están lavadas, de forma que nos podemos ahorrar ese paso. Ponla en un bol.

Paso 2:

Pica la cebolla y los palitos de surimi y mézclalos con la mayonesa .

Paso  3:

Quesadilla de setas, calabacín y aguacate

Las quesadillas es uno de los platos más populares en México. Te proponemos esta receta con verduras, aunque puedes jugar con los rellenos: champiñones, pollo, chorizo… eso sí, el queso que no falte.

Paso 1:

Pela el ajo y pícalo menudo y la cebolla, córtala en juliana. Corta también las setas en trozos gruesos. El calabacín, por su parte, lávalo y córtalo en aros finos. Lava también el jalapeño (o guindilla) y pícalo finito.

Paso 2:

Salmón coulibiac

La receta del salmón coulibiac es de origen ruso, aunque se prepara mucho en todo el centro de Europa. Un plato ideal para fiestas y celebraciones, con el que tendrás un éxito seguro. Salud. ¡Zdrasty!

Paso 1:

Pica la cebolla y el ajo finamente. Acerca una olla o cacerola al fuego y saltea. Cuando la cebolla esté transparente, pasados unos 5 minutos, añade las setas lavadas (si son frescas) o descongeladas (si has optado por una bolsa de setas congeladas), y saltea durante 10 minutos más.

Paso 2:

Empanada de atún y mejillones

Una empanada con el toque marinero de los mejillones. Una delicia para tomar fría o templada con la que triunfar cuando tengas invitados en una cena o merienda informal.

Paso 1:

Pela y pica menudos la cebolla, el calabacín y el ajo. Acerca al fuego una sartén amplia con un chorrito de aceite y sofríe estas verduras. Cuando comiencen a ablandarse, incorpora los pimientos del piquillo escurridos y picados.

Paso 2:

Mutabal (paté árabe de berenjena)

Un entrante o aperitivo típico árabe para disfrutar del sabor de un producto tan mediterráneo como la berenjena. Una receta fácil con la que preparar un paté vegetariano sorprendentemente delicado y exquisito.

Paso 1:

Lava las berenjenas y córtalas longitudinalmente. Ponles un poco de sal y embadúrnalas bien con aceite de oliva. Colócalas en una fuente apta para el horno boca abajo. Mételas en el horno a 180° y ásalas durante una hora, o bien hasta que estén bien blanditas.

Paso 2: