Salmón Honey Mustard

El salmón Honey Mustard es bastante famoso y existen muchas maneras de hacerlo, así que debes encontrar tu forma preferida. La mía sin duda es esta que escribo aquí, que me encanta, y que espero que os encante también a vosotros.
Pondremos a cocer las patatas para luego limpiarlas y cortarlas en finas rodajas. Una vez listas las patatas, colocaremos una capa de ellas sobre un molde especial para hornear.

Scones de Gran Bretaña

Los scones de Gran Bretaña los aprendí por un amigo que era de allí y que era un cocinitas. Si eres un aficionado de la cocina, no te puedes perder esta receta porque es muy interesante hacerla.
Hay que mezclar la harina con la levadura en un bol, y añadir el azúcar y la sal. Cuando estén estos ingredientes bien integrados, se agrega la mantequilla derretida mezclándola bien con una espátula. Se hace un hoyo en el centro del bol en el cual se pone 1 huevo entero y una yema de otro, ambos batidos junto con la leche.

Pimientos del piquillo fritos en salsa

Se sofríe la carne picada con un poco de pimienta, orégano y cebolla (sofrita con anterioridad). Se rellenan los pimientos con esa carne y se pasan por harina, huevo y pan rallado. Después, se fríen y se colocan en una olla. Se sofríe un poco de cebolla, ajo y se añade una cucharadita de tomate frito..y si es casero mejor. Se le añade la nata y se bate bien. Esta salsa se pone con los pimientos y se deja reducir. Queda muy rica. 

 

Receta enviada por Rakicv

Gelatina de almíbar con rodajas de plátano

La gelatina de almíbar con rodajas de plátano no es un postre muy ligero pero está tan bueno que merece la pena hacerlo y probarlo. ¡El postre siempre es lo mejor!
Se pelan las frutas, se les quita el carozo y se ponen a hervir en una cacerola con el agua, el azúcar y el zumo de limón. Una vez que estén tiernas y el líquido se haya reducido casi a la mitad quedando un almíbar, se retiran del fuego.
Retirar las frutas del almíbar, escurrirlas bien y comerlas solas.

Torta marmolada

La torta marmolada queda muy rica y es mucho más sencilla de lo que parece. Yo siempre que la veía en las pastelerías me preguntaba cómo se haría y aquí estoy haciéndola ahora mismo.
Mezclar la mantequilla derretida con el azúcar en un bol hasta formar una pasta bien integrada. Incorporar a esta pasta los huevos, uno por uno, estando a temperatura ambiente, y añadir la harina, la leche y la vainilla. Mezclar todo bien evitando los grumos, y agregar la ralladura de limón al gusto. Batir todo hasta que los ingredientes se unifiquen.

Crema dulce de boniato

Esta crema de dulce de boniato se puede hacer con edulcorante o con azúcar, dependiendo de lo light que queramos que sea, y queda igual de rica. Yo la hago de las dos forma dependiendo de las personas que la vayan a tomar, y a veces no noto mucha diferencia.
Lavar y pelar el boniato sobre una tabla de madera de cocina, y ponerlo en un cazo con agua al fuego. Dejarlo cocer a fuego medio hasta que esté tierno y, una vez listo, dejarlo enfriarse.

Sopa de patatas y judías verdes

Un plato que me gusta muchísimo y que mi abuela siempre me hacía es la sopa de patatas y judías verdes Es muy sencilla de elaborar, con ingredientes muy fáciles de encontrar y con un sabor en boca, increíble. Os cuento como hacerlo y espero que os animéis a elaborarla.
En una sartén con un poco de aceite dorar el ajo laminado, antes de que se dore demasiado añadir la rebanada de pan para que se fría un poco.
A continuación, se echa todo donde las patatas y judías y se tritura con el minipimer. Depende del caldo que tengáis os quedara más o menos espeso.

Vichyssoise tradicional

Todo un clásico de la cocina francesa. La vichyssoise es una delicada crema de puerro que se sirve muy fría….y que resulta deliciosa. Sin embargo esta receta fue creada en Estados Unidos… eso sí, por un chef francés. Louis Diat, el cocinero jefe del restaurante del hotel Ritz, en Nueva York, creó la receta y la incorporó a la carta del restaurante en 1917. Diat se inspiró en el puré de patata y puerro que tomaba de niño, y recordó cómo en verano le añadía leche fría para atemperarla. La bautizó con el nombre de la ciudad de Vichy, muy cercana a su pueblo natal.