Granizado de limón

Si quieres refrescar tus tardes o noches de verano con una bebida especial, os recomiendo que probéis este delicioso granizado de limón. Es la mezcla perfecta entre helado y bebida, y tan sencillo de hacer que pocas serán las tardes en que os resistáis a tomarlo.

Espinacas con marisco y huevo

Hacer espinacas con marisco y huevo es mucho más atractivo que comerlas solas, además de que es un plato mayormente elaborado, por lo que se podría hacer perfectamente para una cena de estas más comprometidas.
Pelar las gambas y los langostinos con cuidado, y reservarlos para después. Los caparazones y las cabezas de éstos se cuecen en una cacerola con abundante agua y un poquito de sal al gusto. Una vez listo, se cuela el caldo y se cuece en él las espinacas añadiendo algo más de sal.

Receta de porridge

El porridge es un receta típica del mundo anglosajón que consiste en un plato de avena cocida. Era el desayuno base de los escoceses, y se ha ido extendiendo por los países limítrofes, cruzando el océano en la época de la colonización. Si queréis probar este estupendo desayuno, lleno de fibra y de sabor delicioso, aquí os dejo esta receta de porridge.

Crema de zanahoria con jengibre

Una crema de verduras o un puré, también puede ser un plato exótico y delicioso. El jengibre aportará a esta sencilla receta un sabor oriental que te encantará.

Paso 1:

Pela y pica la cebolla y las zanahorias en dados pequeños. Pela también el trocito de jengibre y pícalo muy finito. Pon todos estos ingredientes en un bol apto para el microondas, añade un poco de sal y de aceite de oliva. Mézclalo todo bien y tapa con plástico film.

Paso 2:

Filetes rusos

Toda la vida en mi casa se ha llamado al filete hecho con carne picada filete ruso, y eso es lo que os propongo hoy. Unos filetes rusos llenos de sabor sin ningún tipo de aderezo graso en su composición, por lo que son completamente compatibles con cualquier dieta.

Pasta con crema de salmón

Esta pasta con crema de salmón la aprendí del inmenso recetario que tenía mi compañera de piso en Italia, y la verdad que con el tiempo ha ido quedándome mejor.
Hay que colocar en la trituradora la mitad del salmón ahumado y dejarlo bien picado, prácticamente hasta que se haga un puré. Entonces, se mezcla con la nata líquida y se le pasa la batidora. Se salpimienta al gusto y se coloca en un cazo a fuego bajo hasta que esté bien cremoso y removiéndolo de vez en cuando.