Tarta cuajada de chocolate: Un postre fresquito para el verano, ideal para los amantes del chocolate y muy sencillo de hacer… y lo mejor de todo es que no requiere de horno. Se trata de una tarta cuajada. La puedes elaborar en grande, es decir una tarta grande o bien, como hemos hecho nosotros, en moldes individuales, que dará un resultado super elegante. ¡Tú eliges!.
Paso 1:
Para hacer esta tarta cuajada de chocolate, en primer lugar, preparamos la base de la tarta. Para ello, tritura las galletas. Puedes hacerlo poniéndolas en un robot de cocina o bien metiéndolas en una bolsa zip de cocina y golpeándolas con el rodillo.
Paso 2:
Derrite la mantequilla y mezcla con el azúcar en un bol. Bate bien hasta que el azúcar se haya disuelto. Incorpora las gallegas y mezcla bien.
Paso 3:
Extiende esta base sobre el molde de tu tarta, apretando bien para que quede compacta. Como hemos dicho, puedes usar un molde grande para hacer una sola tarta, o bien moldes individuales. Sea como sea, mete el o los moldes en la nevera para que cojan cuerpo durante al menos 30 minutos.
Paso 4:
Disuelve los sobres de cuajada en una pequeña parta de la leche, como un vaso.
Paso 5:
Acerca un cazo al fuego con el resto de la leche. Cuando rompa a hervir incorpora el azúcar y mueve hasta que se derrita. Incorpora también el chocolate, partido en trozos. Cuanto más pequeños sean los trozos del chocolate, antes se derretirán.
Paso 6:
Mantén al fuego, muy suave, sin dejar de remover, hasta que se haya disuelto completamente el chocolate.
Paso 7:
En ese momento añade la leche con la cuajada. Deja hervir 5 minutos más, a fuego muy suave y sin dejar de remover.
Paso 8:
Aparta del fuego y deja enfriar antes de poner esta crema de chocolate en el molde, encima de la base de galletas.
Paso 9:
Vuelve a meter en la nevera para que cuaje la tarta un mínimo de 5 horas, aunque lo ideal es que repose durante toda la noche.
Paso 10:
En el momento de servir… desmolda tu tarta cuajada de chocolate. Puedes dejarla tal cual, o bien adornarla con algún elemento decorativo como fideos de chocolate u otros adornos de repostería. ¡A disfrutar!.
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