Escalopines milanesa con salsa de tomate a las hierbas
Esta deliciosa receta de escalopines milanesa con salsa de tomate a las hierbas le da una vuelta de tuerca a los tradicionales filetes empanados, proporcionando un toque de sabor increíble con el queso rallado y las finas hierbas de la salsa de tomate. Es un plato excelente que encantará a los niños y no requiere de mucha elaboración. ¿Te animas a probarla?
Paso 1:
French toast italiana
Para una cena rápida, para una merienda importante, para un desayuno especial… esta french toast italiana es una opción deliciosa que, con muy poco trabajo, pondrá un plato muy suculento en tu mesa. La tradicional receta francesa se vuelve mediterránea con los toques de orégano y aceite de oliva, lo que supone un extra de sabor irresistible.
Paso 1:
Ensalada de bacalao e higos
Esta deliciosa ensalada de bacalao e higos con toques nikkei (la sabrosa cocina mezcla de peruana y japonesa gracias a cuya popularización disfrutamos hoy de platos tan deliciosos como el ceviche) se prepara en pocos minutos pero tiene un contraste de sabores y texturas tan fantástico que parece un plato mucho más elaborado. El dulzor de los higos equilibra la salinidad del bacalao y, junto a los toques cítricos del limón y ahumados del pimentón, convierten a esta receta en una sorpresa constante bocado tras bocado.
Paso 1:
Falsas mini pizzas de pollo a la barbacoa
Estas falsas mini pizzas de pollo a la barbacoa no sólo son muy rápidas de hacer y deliciosas de comer; ¡también son muy divertidas! Prueba a hacerlas con niños y disfrutad de su rico sabor, lleno de contrastes, y su textura crujiente y jugosa. ¡Seguro que repetís!
Paso 1:
Lo primero que tienes que hacer es precalentar el horno a 180°C; así, cuando llegue el momento de meter a hornear las mini pizzas, estará a la temperatura adecuada y la cocción será uniforme.
Paso 2:
Bacalao gratinado con mayonesa de ajo y perejil
¿En casa se resisten a tomar pescado? Verás cómo rebañan el plato con esta receta de bacalao gratinado con mayonesa de ajo y perejil. Suculento y repleto de ingredientes frescos y naturales, es una opción ideal para una cena reconfortante. Además, ninguno de sus componentes lleva gluten, por lo que es una opción perfecta para celíacos.
Paso 1:
Crema de pollo aromatizada
Por si aún quedaban dudas, los celíacos también pueden comer platos deliciosos y muy originales, como esta crema de pollo aromatizada con especias y sin nada de gluten. Su sabor es toda una sorpresa y, además, resulta muy nutritiva porque lleva todas las proteínas del pollo. Además, su toque aromático de especias es único. ¡Anímate a probarla!
Paso 1:
Fingers de pavo con mahonesa cítrica
Estos fingers de pavo con mahonesa cítrica pueden parecerse mucho a la comida rápida, pero su sabor es infinitamente mejor porque son caseros. El toque original de la mayonesa de mandarina y lima contrasta deliciosamente con la suculencia del pavo con cobertura crujiente. ¡A los niños les encantará! Y a los mayores también.
Paso 1:
Milhojas de pimientos, anchoas y queso
Qué bien sienta toparse con una receta muy sencilla pero con un aspecto tan sofisticado que queda genial en cualquier mesa festiva y un sabor tan increíble que parece mentira el poco tiempo que has empleado en hacerla. ¡Como este milhojas de pimientos, anchoas y queso! Un entrante ideal, saludable y riquísimo que lo único que exige de ti es un cuchillo muy bien afilado y un poquito de maña con él. ¡Anímate a probarla!
Flan de batido de vainilla y galletas con salsa de fresas
¿Tienes una merienda especial con niños? ¿O sin niños pero os apetece recrear una merienda suculenta y muy dulce, propia de la infancia? Entonces, esta receta es para ti. Este flan de batido de vainilla y galletas con salsa de fresas es un capricho goloso y riquísimo que hace las delicias de todo el mundo, grandes y pequeños. Permítete este lujo y disfruta de su exquisito sabor.
Paso 1:
Falafel
Si el kebab se ha llevado la fama de la comida rápida de Oriente Medio por excelencia es porque no tanta gente ha probado el falafel. Estas deliciosas albóndigas hechas a base de garbanzos triturados son un aperitivo exquisito, sin grasas saturadas y, además ¡vegetariano! Y, si no los acompañas con salsa de yogur, pueden ser perfectamente aptos para veganos e intolerantes a la lactosa. ¡Una receta imbatible!
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