Tallarines a la mar

La pasta con las salsas tradicionales como la carbonara o la boloñesa están buenas, eso no lo pienso discutir, pero estos tallarines a la mar para mí resultan uno de los platos de pasta más deliciosos que existen. Me encantan los sabores de las almejas y las gambas combinados con el picante de la cayena que hacen de este plato de pasta algo realmente especial.

Empezamos por abrir las almejas poniéndolas en una cazuela con agua al fuego y las vamos retirando según se vayan abriendo. Si alguna no se abre, retirarla porque seguramente este mala y las intoxicaciones con marisco son de las peores que puede haber. Guardamos ese agua que nos ha servido para abrir las almejas.
Por otro lado pelamos las gambas, y hervimos las cascaras de las gambas que hemos retirado y colamos este caldo resultante.
Cuando vayamos a hacer la pasta, juntamos el caldo de la cocción de las gambas y el que nos sirvió para abrir las almejas, en el caso de que haga falta se añade más agua, y sazonamos. Cuando empiece a hervir añadimos los tallarines y dejamos que se hagan durante el tiempo que nos indique el fabricante en el envase. Una vez que estén listos los apartamos y escurrimos.
Por último en una sartén ponemos bastante aceite y en él vamos a freír los dientes de ajo cortados en láminas y añadimos las cayenas. Cuando los ajos estén fritos añadimos la pasta y damos unas cuantas vueltas para que la pasta se empape del aceite. En último lugar añadimos las almejas y las gambas y seguimos dando vueltas hasta que las gambas estén hechas.
Sirve los tallarines a la mar en platos y sentaros a comer. Prepararos para disfrutar.