Una receta deliciosa y fácil de elaborar para salirse de la rutina a la hora de cocinar pollo. Este tajine de pollo con ciruelas, almendras y cuscús es exótico y aromático, con los sabores de las mejores especias marroquíes.
Paso 1:
Para elaborar este tajine de pollo con ciruelas, almendras y cuscús, lo primero que vamos a hacer es preparar el pollo, esto es, limpiarlo de restos de impurezas y grasa. Lo normal es haber comprado el pollo ya troceado. O haber comprado solo muslitos o contramuslos. Salpimienta el pollo.
Paso 2:
Por otro lado, pela cebolla y pícala en tiritas finas. Aparte, pela el jengibre con la ayuda de un cuchillo puntilla o de una cuchara (el jengibre se pela muy fácilmente con el envés de una cuchara). Por último, lava el calabacín y, sin pelarlo, pártelo en bastones gorditos. Reserva todo por separado.
Paso 3:
Acerca una cacerola amplia al fuego, o la base del tajine, con un hilo de aceite. Cuando tenga temperatura, dora los trozos de pollo por todos los lados. A medida que vaya estando, ve sacándolos a un plato aparte.
Paso 4:
Añadimos al mismo aceite la cebolla picada y dejamos pochar a fuego suave durante 7 minutos aproximadamente, o hasta que esté bien hecha. Añade también los ajos enteros y un poco chafados, sin pelar.
Paso 5:
Cuando la cebolla esté bien hecha, blandita y transparente, vuelve a incorporar los trozos de pollo a la cacerola. En este momento, incorpora el jengibre, la canela, el ras al hanut y la cúrcuma. Añade el caldo de pollo y cierra la cacerola. Deja cocer a fuego suave durante 30 minutos.
Debes tener en cuenta que si usas una cacerola normal deberás poner más caldo de pollo… de forma que cubra el pollo. Pero si usas un tajine, puedes reducir a la mitad al caldo, o incluso o menos… dado que el tajine cuece los alimentos en sus propios jugos y no requiere ni tanto aceite ni tanto caldo en los guisos.
Paso 6:
Cuando el tajine de pollo con ciruelas, almendras y cuscús lleve unos 10 minutos de cocción, incorpora las almendras tostadas y las ciruelas pasas.
Incorpora también los bastones de calabacín.
Paso 7:
Mientras se termina de hacer el pollo, prepara un cuscús sencillo. Para ello, pon la sémola en un bol y añade un vaso grande de agua fría. Remueve para que se mojen bien todos los granos. Inmediatamente después, escurren bien sobre un colador de trama fina la sémola. Vuelve a poner la sémola húmeda en un bol, añade una pizca de sal y riega con aceite de oliva. Deja reposar 10 minutos. Trabaja bien la sémola con las manos durante un par de minutos con las palmas de las manos, para que los granos queden bien impregnados. La sémola debe quedar bien brillante. Calienta agua (el mismo volumen que de sémola) y, cuando rompa a hervir, retírala del fuego y viértela poco a poco sobre la sémola. Cubre el bol con papel film y deja reposar la sémola durante 10 minutos para que crezca. El secreto para que el cuscús quede suelto es trabajar bien la sémola cuando está mojada con el aceite de oliva.
Presentación:
Sirve tu tajine de pollo con ciruelas, almendras y cuscús de tal forma que el cuscús quede debajo y por encima el guiso de pollo, dejando que su caldito impregne bien la sémola de cuscús. Adorna con unas hojitas de menta y de cilantro y unas escamas de sal. ¡Delicioso!
Sugerencia:
A la hora de hacer este tajine de pollo con ciruelas, almendras y cuscús, no dudes en emplear la sémola para cuscús de marca DIA, que es de grano medio, el calibre perfecto para una receta como ésta.
En Demos la vuelta al día: Tajine, ¿qué es?