Sopa de rabo de toro

La Sopa de rabo de toro es una receta que aprendí cuando estuve de Erasmus. Nunca antes la había comido hasta que la aprendí de mi compañera de cuarto. Ella la solía preparar porque la encantaba, asique de vez en cuando se acercaba a la carnicería, compraba un trozo de rabo de toro, y se la preparaba. El sabor de esta sopa es fuerte, como la de la carne con la que se hace, pero está llena de matices que la enriquecen y hace que sea un plato delicioso.

Se comienza la preparación de esta receta por dorar los trozos de rabo en el horno, previamente pasados por harina, salpimentados y regados con un chorro de aceite.
Cuando estén dorados, se tienen que incorporar las verduras a la bandeja de horno y seguir dorando. Cuando estén se pasan ambos ingredientes a una olla con abundante agua fría.
Se lleva al fuego y cuando comience a hervir, se incorporan las hierbas aromáticas junto con las claras de huevo batidas.
A la hora de cocción, retiramos las zanahorias y el nabo, que luego utilizaremos como guarnición del futuro consomé.
Y ya en la última hora se incorpora el vino oporto, que lo aromatiza, dejando clarificar lentamente.
Cuando haya pasado otra hora, más o menos, y veamos que se ha consumido gran parte del caldo, ya estará lista la sopa de rabo de toro para servir. Probadla porque merece la pena.