Sopa de ajo para el frío del invierno

Las sopas, al igual que las cremas, son platos que nos permiten jugar con muchísimos ingredientes ya que se puede elaborar de cualquier ingrediente que os podáis imaginar. Yo cuando las hago, aprovecho para hacerlas de alimentos que a mis hijos no les gustan comer. De esta manera consigo que sí que se los coman y lo mejor de todo, sin rechistar ni protestar. Hoy os voy a contar como realizar una rica sopa de ajopara el frío de invierno. Como veis es muy famosa en mi tierra y está muy rica.
Lo primero que vamos hacer será poner el agua a calentar con una pizca de sal y un poquito de colorante.
Después, vamos a trocear el pan en taquitos (en algunos sitios lo llaman picatostes) y lo vamos a freír en una sartén con un chorrito de aceite de oliva, removiendo de vez en cuando para que no se queme.
Mientras, en otra sartén, hay que verter aceite de oliva y cuando esté caliente, echaremos el ajo bien picadito; removeremos para que no se queme y cuando esté doradito, añadiremos una cucharadita de pimentón. Esta mezcla se echa en el agua que ya estará hirviendo.
A continuación, vamos a remover bien y cuando vuelva a hervir, echaremos el pan tostadito. Vamos a seguir removiendo hasta que vuelva a hervir y luego bajaremos el fuego.
Esta sopa puede ya tomarse así, pero yo le doy un toquecito de "mi abuela" y dependiendo de los comensales.
Finalmente, yo le suelo batir bien el huevo y echarlo poquito a poco mientras se remueve la sopa de ajo. No vamos a dejar de revolver hasta que el huevo quede deshecho y ya cuajado. ¡Rica!

Espero que os guste. Además resulta muy económica.