Sándwich con queso fundido

Cuando me entra el hambre, y no tengo muchas ganas de ponerme a cocinar, mi recurso fácil siempre son los sándwiches. Es una forma sencilla y deliciosa de alimentarse. De entre mis preferidos se encuentra el sándwich con queso fundido que os digo como hacer a continuación. Tiene bastantes calorías, pero su sabor es tan delicioso que merece la pena el exceso.

Lo primero que tenemos que hacer es untar de mantequilla las partes exteriores de las rebanadas de pan, es decir aquellas que van a tocar la sartén.
A continuación ponemos dentro del pan las lonchas de queso, de una a cuatro aproximadamente, dependiendo de lo que prefiramos nosotros. Lo mejor es hacer una mezcla de quesos diferentes, ya que de esta manera quedará mucho más cremoso, pero es muy importante que el queso que escojamos se funda bien, por lo que los quesos tipo cheddar o gouda son estupendos para esto.
Cogemos ahora una sartén y la precalentamos unos minutos.
Cuando tenga temperatura, ponemos el sándwich en la sartén y colocamos encima un plato que pese.
Dejamos que se vaya haciendo el sándwich lentamente con cuidado de que no se queme y cuando veamos que el sándwich esté bien dorado le damos la vuelta volviendo a poner el plato encima.
El sándwich con queso fundido estará listo cuando veamos que los dos lados están bien dorados y tostados y el queso está derretido y sobresaliendo un poco.