¡La salsa de arándanos me gusta hasta para vista! Creo que es muy rica para acompañar con todo tipo de alimentos y para servir fría o caliente. El color que tiene es muy llamativo y queda perfecto para hacer una presentación original y diferente.
Ponemos una cazuela en el fuego con medio litro de agua y la dejamos calentar hasta que hierva. Cuando está hirviendo mucho, añadimos los arándanos y los tenemos haciéndose en el fuego unos 10 minutos, siempre tapados. Para saber que están listos, los arándanos tienen que haberse abierto. Entonces, añadimos el azúcar mientras el agua sigue hirviendo, y lo removemos bien para que la salsa de arándanos quede un poquito espesita y bien dulce.