Rosquillas de San Isidro (las listas)

Receta de: Postres y dulces
Plato: Plato frío, Postre
Cocina: Ocasiones especiales, Para niños, Tradicional
Rosquillas de San Isidro (las listas)
Fácil
41-50
301-500
Rosquillas de San Isidro (las listas)
Valoración media
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Ingredientes
  • Harina (250 gr. )
  • Aceite de oliva (60 ml. )
  • Azúcar (60 gr. )
  • Huevos (3 pequeños, o 125 gr. )
  • Agua (400 ml. (para el almíbar))
  • Azúcar (200 gr. (para el almíbar))
  • Azúcar glas (100 gr. (para el glaseado))
  • Limón (5 ml. de zumo (para el glaseado))
  • Caramelo líquido (5 gr. (para el glaseado))
  • Harina (500 gr. )
  • Aceite de oliva (125 ml. )
  • Azúcar (125 gr. )
  • Huevos (6 pequeños, o 250 gr. )
  • Agua (800 ml. (para el almíbar))
  • Azúcar (400 gr. (para el almíbar))
  • Azúcar glas (200 gr. (para el glaseado))
  • Limón (10 ml. de zumo (para el glaseado))
  • Caramelo líquido (10 gr. (para el glaseado))
  • Harina (750 gr. )
  • Aceite de oliva (185 ml. )
  • Azúcar (185 gr. )
  • Huevos (9 pequeños, o 375 gr. )
  • Agua (1200 ml. (para al almíbar))
  • Azúcar (600 gr. (para el almíbar))
  • Azúcar glas (300 gr. (para el glaseado))
  • Limón (15 ml. de zumo (para el glaseado))
  • Caramelo líquido (15 gr. (para el glaseado))
Elaboración

Se conocen como las rosquillas de San Isidro (las listas) porque incorporan almíbar y glaseado. Son más jugosas y dulzonas que las rosquillas ‘tontas’ pero ambas se disputan el liderazgo, en cuanto a dulces se refiere, en el Día de San Isidro que celebran los madrileños cada 15 de mayo. Si nunca las has probado, tienes que hacer las dos… y después nos cuentas cuál te gusta más…

Paso 1:

Mezcla el aceite, los huevos y el azúcar y añade después la harina. Trabaja la masa en un bol, ayudándote con una espátula hasta que los ingredientes se vayan integrando. Embadurna la mesa de trabajo ligeramente con aceite para que la masa no se pegue y trabájala con las manos hasta que blanquee y coja un poco de nervio (es decir, que quede homogénea y que no se pegue ni a las manos ni a la mesa).

Paso 2:

Corta trocitos de masa y amásalo para formar un palo largo y haz la rosquilla sellando los extremos con un apretón de dedos para que no se abra en el horno.

Paso 3:

Precalienta el horno a 230º C y, mientras, deposítalas en una fuente de horno, con la suficiente separación entre ellas como para que no se peguen cuando se inflen. Déjalas cocer unos 15 minutos hasta que estén doradas.

Paso 4:

En este momento tenemos las llamadas rosquillas tontas… así que ponte manos a la obra para elaborar el almíbar y un glaseado que puedes variar a tu gusto (otros aromas, colores….).  Primero pon al fuego un cazo con el agua y el azúcar para hacer el almíbar. Lleva a ebullición y deja cocer cinco o diez minutos. Apaga el fuego y reserva.

Paso 5:

Cuando retires las rosquillas del horno y hayan perdido algo de temperatura, sumérgelas en el almíbar y deposítalas sobre una rejilla para que escurran.

Paso 6:

Ahora vamos a por el  glaseado (o fondant) para tus Rosquillas de San Isidro (las listas): pon el azúcar glas en un recipiente ancho en el que puedas sumergir las rosquillas, añade el almíbar caliente que te ha sobrado, el zumo de limón (si quieres más sabor, añade aroma) y el caramelo (que te quedará mejor si lo haces de forma casera, quemando un puñado de azúcar). Bate bien hasta obtener un líquido ligero.

Paso 7:

Mete las rosquillas en el glaseado y devuélvelas a la rejilla para que se sequen. En un rato, se habrá enfriado un poco y estará más espeso. Con una cuchara o con los dedos sumergidos en el glaseado, vierte los hilos que caen sobre las rosquillas. Deja reposar hasta que el baño esté seco y crujiente.

Truco:

Puedes hacerte con algún colorante alimentario y dar al glaseado un toque diferente con el color que más te guste. También puedes utilizar adornos de repostería para hacer las rosquillas más divertidas.

Presentación:

Puedes dejar sin decorar algunas de las rosquillas al sacarlas del horno, así podrás presentar ante tus invitados las dos opciones, para que los más o los menos golosos puedan elegir: ¿tontas o listas? A la hora del café, son la opción perfecta. Y a los niños, les encantarán.

Sugerencia:

Existen muchos tipos de harina, dependiendo del uso que le quieras dar. Pero si te cuesta decidirte, prueba la harina de trigo marca DIA porque es ideal por su fuerza intermedia, y te servirá tanto para elaborar bizcochos como para empanados o para incorporar a tu receta de pan casero. 

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