Pollo amarillo al chilindrón

El pollo al chilindrón es uno de esos guisos de toda la vida difícilmente mejorables. El chilindrón es una salsa a base de pimientos, muy tradicional de Aragón, aunque se prepara por todo el país. Su preparación más frecuente es con pollo, aunque también se prepara el cordero al chilindrón. La receta original, apenas ha cambiado a lo largo del tiempo, ¡claro!, ¿para qué va a cambiar algo tan delicioso? 

Paso 1:

Salpimenta el pollo y enharínalo ligeramente. Para asegurarte que no has puesto demasiada harina, una vez que hayas pasado el pollo por la harina, da golpes a cada trozo con las manos para retirar el exceso. Pica la cebolla y los pimientos en trozos menudos. Pica también el tomate en dados.

Paso 2:

Coloca en una cacerola o rondón un chorro de aceite de oliva extra y acércalo al fuego. Dora en él el pollo dándole vueltas para que tome color por todos los lados.

Paso 3:

Añade la cebolla y los pimientos picados, dale unas vueltas y deja cocinar 5 minutos. Añade después los dados de tomate. Deja pochar a fuego suave y cuando la cebolla vaya estando ya transparente, añade el vaso de vino. Debes rehogar todo el conjunto con cuidado de que no se pegue al fondo. Pica el perejil y añádelo, reservándote unas hojas para adornar al final.

Paso 4:

Cuando el vino se haya evaporado prácticamente todo, añade el agua hasta cubrir el pollo y deja cocer durante 30 minutos o hasta que la carne se despegue del hueso.

Paso 5:

Rehidrata los pimientos choriceros introduciéndolos en agua templada y, cuando se hayan ablandado, raspa su carne de la piel. Añádesela al guiso.

Presentación:

Sirve tu guiso bien calentito y adórnalo con unas ramitas de perejil. Acompáñalo si lo deseas con patatas fritas… que estarán deliciosas si las mezclas con la salsa… ¡irresistible!