Patatas fritas con huevos rotos al toque de sobrasada

No hay cosa más sencilla que un huevo frito con patatas, y a su vez más placentera. Puede que este plato sea mi cena favorita, con todas sus versiones, lo que pasa que uno no se lo puede permitir todas las noches por mucho que quiera. Si quieres puedes hacer esta versión de patatas fritas con huevos rotos al toque de sobrasada que es uno de mis últimos descubrimientos. Un placer como pocos hay en la vida.

En primer lugar se pelan, lavan y cortan las patatas de la forma que se prefiera, yo en este caso lo suelo hacer es forma de bastoncito.
En una sartén se fríen las patatas en aceite abundante y muy caliente junto con los ajos.
Cuando las patatas y los ajos estén dorados se sacan y se escurren en un plato con papel absorbente para quitar el exceso de aceite. Se hecha la sal por encima de las patatas y los trozos de sobrasada para que se vayan deshaciendo con el calor que aún conservan las patatas.
EN el mismo aceite en el que se han frito las patatas, se fríen los huevos.
Se ponen los huevos junto con las patatas y la sobrasada en un plato y justo antes de servir se espolvorea todo con un poco de pimienta recién molida y se rompen los huevos para que su yema impregne el resto de componentes de este sabroso plato.

En el caso de que no tengas sobrasada, lo puedes sustituir por longaniza roja fresca o chorizo.
Antes de meter los ajos en el aceite para freír las patatas, les hacemos un corte para que den más sabor a dicho aceite y se hagan bien por dentro.
Espolvorear pimienta negra encima como toque final antes de romper los huevos.