Una salsa presente en la mayoría de los platos de origen mexicano, es el guacamole. Como su nombre indica, el aguacate es su principal ingrediente mezclado con otras verduras, y se hace una especie de majado. A mí me encanta comerlo solo con nachos o como salsa en los tacos. Os cuento como lo preparo y espero que os guste tanto como a mí
Lo primero de todo será tener lavadas previamente todas las verduras. Después vamos a cortar los tomates en daditos quitando la pulpa y las semillitas, cortaremos también el trozo de puerro y laminaremos en rodajas finas. A continuación tenemos que cortar los aguacates a la mitad, vaciarlos con una cuchara y seguidamente los meteremos dentro de un bol.
Cortaremos los dientes de ajo en laminas finas y los añadiremos al bol, cortaremos el limón a la mitad y los exprimiremos una mitad encima de los aguacates. Los escachamos hasta hacer una pasta sin grumos, totalmente lisa.
Añadiremos los daditos de tomate y las rodajitas de puerro, lo mezclaremos todo hasta que se quede una pasta uniforme.
Luego echaremos un chorrito de aceite, (equivalente a una cucharita de postre), añadiremos el orégano (una cucharadita de postre), removemos y sal pimentamos al gusto.
Lo dejaremos enfriar en la nevera durante unos 15 minutos y ya tenemos guacamole. Espero que les guste y lo disfruten en buena compañía.
¡Riquísimo!