Galletitas de agua

Las galletitas de agua son seguramente uno de los aperitivos o snacs más ricos que hay, y son facilísimos de hacer. Se pueden comer ya sean solos o con alguna salsa, como el guacamole o una de queso, y porque no con un poco de pate untado en ellas. Prueba a hacerlas y ya verás cómo repites.

Lo primero que hacemos es poner en un bol todos los ingredientes, uniéndolos, e iremos trabajando todo muy bien con las manos hasta formar un bollo grande que debe ser suave y elástico.
Ahora la cubrimos con un paño y dejamos descansar la masa a temperatura ambiente durante unos 30 minutos.
Estiramos la masa con un rodillo sobre la mesa enharinada y doblamos varias veces al medio la masa sobre sí misma.
Volvemos a estirar la masa con el rodillo y enharinamos. La masa debe quedar de unos 3 mm. Cuando sea así de gruesa, vamos a cortar las galletitas con un vaso o molde y con un tenedor pincharlas.
Las tenemos que ir colocando según las hacemos en una placa enharinada, cubriéndolas con papel film y dejando que reposen unos 45 minutos.
Por último las hay que llevar al horno a temperatura moderada durante unos 25 minutos para que se hagan.
Pasado ese tiempo, sacamos las galletitas de agua y solo tenemos que resistirnos un poco para no comerlas antes de que se hayan enfriado.

Un consejo. Haz una cantidad enorme, porque una vez que empieces a comerlas no podrás parar.