Cordero guisado con patatinas

No hay nada más rico que comer un buen plato de cordero guisado con patatinas que cuando hace frío. A mí es lo que más me gusta y con lo que más disfruto. Yo lo suelo cocinar los lunes, después de estar todo el fin de semana comiendo en bares o a deshora. Espero que os guste esta receta y que os animéis a hacerla. ¡Os encantará!
En primer lugar se coge el cordero, se limpia y se corta en trozos.
Después tenemos que preparar el adobo para el cordero. Para ello se hace una picada con los ajos, el perejil, la sal, el tomillo, el romero y los 2 vasos de vino blanco durante 3 horas.
A continuación, transcurrido ese tiempo, se pasa el cordero por la harina y se hace dorar, en una cazuela con aceite de oliva. Se reserva.
Seguidamente se corta la cebolla en juliana, se rallan los tomates y se cortan los pimientos a tiras.
En la misma cazuela y en el mismo aceite, se pochan las cebollas y la zanahoria. Cuando empiecen a dorarse, se le añade el pimentón dulce, se le da unas vueltas y sin dejar que se queme, se añade el tomate rallado y se termina el sofrito.
Luego se coloca el cordero sobre el sofrito y se le añade parte del vino del adobo (el que sea necesario) dejándolo cocer a fuego lento o medio durante 1 hora, más o menos.
Mientras tanto, se pelan las patatas y se cortan en cuadrado grandes.
Se fríen las patatas a parte, en una sartén con aceite de oliva.
Una vez fritas se añaden al guiso, junto con los pimientos. Se dejan cocer un rato todo junto, hasta que el cordero esté bien tierno.
¡Listo el cordero guisado con patatinas!

CONSEJOS:
-Acompañar de un buen trozo de pan.

¡Buen provecho!