Canelones con bechamel

El preparar un estupendo plato de canelones es mucho más sencillo de lo que creemos, y la verdad es que el resultado del proceso es un auténtico placer. A mí me encantan, sobretodo esta receta de canelones con bechamel de mi madre, que los prepara desde hace años en casa y a todos nos encanta.

En agua hirviendo se hace la pasta de los canelones, durante unos 10 minutos. Pasado ese tiempo se sacan y se ponen directamente las placas en agua fría y luego se sacan y se ponen a secar sobre un paño de cocina. Se reservan así.
Se hierve el seso aparte, con agua y sal y se reserva.
Ahora nos ponemos a hacer el relleno, para lo que se asan en una cazuela el solomillo, la pechuga de pollo, las salchichas, las tiras de panceta o jamón, los hígados, la cebollas, los tomates, salpimentándolo, con una buena cantidad de aceite de oliva y cuando esté medio hecho, se le añade el vasito de jerez. Se deja hasta, que el asado esté bien dorado.
Mientras tanto se hace la salsa bechamel, tal como indica la receta.
En el momento en que esté terminado el asado, se tritura en una prensa o con la batidora toda la carne junto con los hígados, los tomates y la cebolla, triturando también los sesos hervidos previamente.
Esto se mezclará con la bechamel, sobre el fuego, que sea bajito, rectificándolo de sal y pimienta en el caso de que fuera necesario. Toda esta mezcla será el relleno y lo dejaremos enfriar. Luego lo metemos en la nevera durante unas horas, para que se ponga dura.
Ahora se coge con una cuchara sopera el relleno y se coloca en tiras sobre cada una de los cuadrados de la pasta del canelón y lo enrollamos.
Se van colocando sobre la fuente haciendo filas, y cuando estén todos se cubren con la salsa bechamel y se espolvorea de queso rallado, se ponen unas nueces de mantequilla por toda la superficie y se lleva a gratinar.
Cuando estén los canelones con bechamel bien dorados, ya se pueden sacar y llevarlos a la mesa para servirlos. Deliciosos.