Estos bocaditos de queso fresco y anchoa son un aperitivo delicioso, y que en casa solemos hacer bastante a menudo. Los hacemos en una buena cantidad, para así los que sobren guardarlos y comerlos a cualquier hora, dándoles solamente un golpe de calor para que el queso se deshaga. Son deliciosos.
Antes de ponernos a preparar la receta lo que hacemos es encender el horno para que vaya adquiriendo temperatura, a unos 200º.
Empezamos por untar cada rebanada de pan con un poco de aceite y espolvoreamos orégano encima.
A continuación cortamos el queso mozzarella en 8 rodajas y reservamos.
Colocamos las rebanadas de pan encima de una fuente de horno forrada con papel de hornear.
Ponemos por encima una rodaja de queso y una anchoa.
Espolvoreamos la superficie con un poco de orégano.
Repetimos esta operación con el resto de las rebanadas de pan hasta agotar los ingredientes.
Las llevamos a hornear durante unos 20 minutos más o menos, tiempo tras el cual ya tendremos listos para disfrutar estos deliciosos bocaditos de queso mozzarella y anchoa.