Tostada de croqueta y ketchup

¡Una tostada de croqueta y ketchup para un aperitivo en casa con amigos es una idea estupenda! Realmente, parece que llena bastante, y es cierto, por eso hay que servir cantidades pequeñas, para que haya hueco para lo que viene después.
Empezamos haciendo una bechamel, poniendo las dos cucharadas de aceite en la cacerola a fuego muy bajito. Cuando esté caliente, echamos la harina y removemos rápidamente para que no se queme ni se pegue. A continuación, añadimos la leche poco a poco, sin dejar de remover (se puede usar la batidora eléctrica, será más fácil) para que no se formen grumos, hasta que tengamos una crema de textura i muy espesa, ni muy líquida. Por último, añadimos los huevos cocidos, muy picaditos, y la sal al gusto, lo mezclamos bien, y lo dejamos enfriar.
Una vez fría la bechamel de las croquetas, vamos haciendo bolas y las pasamos por huevo batido y pan rallado. Ponemos una sartén con aceite de oliva en el fuego, y freímos las croquetas hasta que se doren al gusto.
Cogemos pan del día anterior y lo partimos en rebanadas, Las ponemos al horno unos minutos, hasta que queden doradas por un lado, y otros tantos minutos, hasta que se doren por el otro.
Para montar la tostada, lo hacemos al gusto. Se puede untar ketchup en la rebanada de pan y poner la croqueta encima, o se puede hacer al revés, o poniendo ketchup en los dos lados. También se puede añadir un poquito de mayonesa y lechuga.