Tarta helada de vainilla y chocolate con nata y guindas

Mi tarta preferida, elaboración de mi madre, y a la que siempre le digo que me la prepare, es una rica tarta helada de vainilla y chocolate con nata y guindas. Es una tarta que de aspecto es impresionante y de sabor muy muy rica. Además la combinación de sabores hace que su sabor sea indescriptible, solo puedo decir que está muy muy buena y que os animéis a prepararla.

En primer lugar haremos el helado de vainilla. Para ello, herviremos la leche en un cazo de fondo grueso con la vainilla. Una vez esté, apartaremos y dejaremos reposar durante 30 minutos.
Mientras, en otro cazo, pondremos la leche al fuego y añadiremos el chocolate troceado, dejaremos fundir, y apartaremos. A continuación, cogeremos la leche con la vainilla y añadiremos las yemas de huevo batidas, y el azúcar, volveremos a poner al fuego. Seguidamente y en cuanto esté caliente, pero sin llegar a hervir, apagaremos el chocolate y añadiremos las yemas batidas y el azúcar.
Seguidamente, volveremos a calentar al fuego y antes de que llegue a hervir apartaremos. Con estos pasos ya dados, cogeremos 2 recipientes y meteremos en uno la mezcla de vainilla, y en el otro la de chocolate y los meteremos al congelador hasta que estén helados. De vez en cuando dales unas vueltas, ya que de esta manera no se formarán cristales de hielo.

Hechos los helados haremos el bizcocho. En primer lugar tenemos que precalentar el horno. Después, vamos a derretir el chocolate en una cacerola y lo vamos a dejar entibiar. Vamos a mezclar la mantequilla con la mitad del azúcar.
A continuación, tenemos que incorporar el chocolate tibio junto con las yemas y batiremos hasta conseguir una masa ligera.
Seguidamente, tenemos que mezclar la harina junto a la levadura y añadirlo a la mezcla anterior, con una batidora de varillas montar las claras a punto de nieve junto con el azúcar. Con una lengua lo iremos incorporando al compuesto anterior.
Ahora, vamos a introducir el bizcocho en el horno a 180ºC entre 50 y 60 minutos. El horno, lo tenemos que bajar a 160ºC a mitad de la cocción. Pasado el tiempo, apagaremos el horno y dejaremos reposar.
Desmoldamos y lo cortamos por la mitad. Ponemos la mitad inferior cubriendo un molde. Encima de éste, ponemos una buena capa de helado de chocolate. Cubrimos el helado con la otra mitad del bizcocho, el cual cubrimos con el helado de vainilla.
Lo volvemos a meter al congelador.
Después de unas horas, desmoldamos la tarta y la cubrimos con la nata montada. Espolvoreamos por encima las nueces y el chocolate, y decoramos con unas cerezas en almíbar.
Lo volvemos a meter en el congelador hasta la hora de servir.

¡Deliciosa esta tarta helada de vainilla y chocolate con nata y guindas!

¡Que aproveche!