Tarta helada de leche condensada

Las tartas frías son para el verano. Una tarta helada de leche condensada te dará la energía necesaria para la vuelta al cole y también para seguir con tus vacaciones en la playa.

Este tipo de tartas, te permiten disfrutar del sabor de un postre sin tener que encender el horno. Esta tarta de leche condensada es muy fácil de preparar y será tu gran aliada si tienes visitas improvisadas. 

Necesitas una noche de nevera para que se quede realmente en su punto de frío pero no dudes en prepararla en ración doble, se acabará en un pispas

Elaboración

Paso 1 Mezclar la Leche condensada DIA con la nata que debe estar muy fría y batir hasta que quede un poco espesa. La idea no es montar la nata pero si nos hace falta cierto espesor y que entre algo de aire para que no se quede demasiado pegada

Paso 2 Añadir el chocolate negro picado (reservar unos trozos para la capa superior) y mezclar para repartirlo bien. Usamos chocolate negro al 70% Delicious pero podrás encontrar muchas variedades, hasta el 85% de cacao puro

Paso 3 En un molde rectangular de aproximadamente 20x30 cm colocar una primera capa de galletas. Puedes usar galletas tipo maría

Paso 4 Verter dos terceras partes de la preparación en el molde y cubrir con otra capa de galletas. Añadir el resto de la mezcla y repartir cubriendo todas las galletas. Repartir los trozos de chocolate negro reservados por encima. Lo ideal es que sean muy pequeños para que no pesen mucho y no se hundan en el fondo de la tarta

Paso 5 Dejar en el congelador durante toda la noche y cortar en porciones para servir.

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